El futuro de Cali demanda una ciudadanía con un mayor nivel de involucramiento en los temas públicos, que nos permita impulsar los objetivos comunes, con mejor conocimiento de nuestra ciudad y apropiación real sobre nuestro rol protagónico en el desarrollo. Es claro que la acción gubernamental es insuficiente e incompleta sin la acción ciudadana.

En pleno Siglo XXI es indiscutible la conexión entre una vida digna, el ejercicio de una democracia real y la sostenibilidad. Para ello, los ciudadanos debemos trabajar con una visión de largo plazo, planteando proyectos ambiciosos y transformadores que vayan más allá de los objetivos electorales de las campañas, a la vez que debemos reivindicar y apropiarnos de los medios que permitan alcanzarlos.

Según la CAF, empoderar al ciudadano en la planificación de proyectos de largo plazo es clave para las ‘ciudades con futuro’, llamando la atención sobre la necesidad de poner al ciudadano en el centro de la agenda urbana para vencer la triple informalidad -laboral, vivienda y transporte- que impide cerrar la brecha de la desigualdad y promover un desarrollo sostenible.

Históricamente las grandes ciudades como Nueva York, Singapur, Londres y otras que han tenido un crecimiento equilibrado entre el desarrollo urbano, lo habitacional, medioambiental y el bienestar de sus habitantes, han tenido como punto común un fuerte trabajo de empoderamiento ciudadano, el cual ha permitido la ejecución de las iniciativas en el tiempo.

Enhorabuena por la iniciativa ‘Cali para mí’, una conversación ciudadana sin precedentes que convocó a cerca de 18 mil caleños a priorizar los proyectos que consideran se deben desarrollar en el mediano y largo plazo en nuestra ciudad, escuchando a los ciudadanos, y yendo más allá de las variables técnicas de la planificación. Insto a todos los actores del desarrollo en Cali a que conozcan y se impliquen en estos resultados que han sido recientemente entregados por las entidades promotoras, entre ellas ProPacífico, la Cámara de Comercio de Cali, Comfandi,
Comfenalco, las universidades del Valle, Javeriana Cali, Autónoma de Occidente, Icesi, San Buenaventura y otras 20 organizaciones más.

Los caleños, sin responder a ningún candidato ni a ningún partido político, votaron por 20 proyectos prioritarios; varios de ellos responden a necesidades sentidas y otros son iniciativas innovadoras. Seguridad ciudadana, educación de calidad, salud a tiempo, cero hambre, galería de acopio campesino, mejores colegios públicos, mejores vías, un parque del reciclaje y del tren de cercanías, fueron algunos de los proyectos que predominaron en las votaciones. También el mejoramiento de los barrios incompletos, un bloque de iniciativas de impacto ambiental, y otro de iniciativas que promueven la cultura, la diversidad y el civismo, aspectos que históricamente han sido prioritarios para los caleños.

Sin duda el empoderamiento ciudadano en la construcción de la ciudad hace que todos nos articulemos en pro de lo que consideramos importante para el bienestar colectivo. Este respaldo permite que los proyectos estratégicos trasciendan los tiempos de las administraciones públicas y se puedan llevar a cabo en el mediano y largo plazo, permitiendo una mayor democratización en las decisiones y visiones.
La apuesta es materializar esta agenda local priorizada por la ciudadanía, de la mano con los tomadores de decisiones y gobiernos venideros. Ojalá que todos los candidatos la tomen como insumo y que los ciudadanos no nos quedemos en la priorización, sino que nos impliquemos en los diversos espacios democráticos y en las acciones necesarias para que esta se haga realidad.