Israel lanzó este domingo, 24 de agosto, una oleada de bombardeos contra posiciones de los rebeldes hutíes en Yemen, en el marco de la escalada regional que sigue desatada por la guerra en Gaza.
El ejército israelí informó que sus ataques se concentraron en la capital Saná y que tuvieron como objetivo zonas cercanas al palacio presidencial, instalaciones de almacenamiento de combustible, centrales eléctricas y otros objetivos militares.
“Los ataques se llevaron a cabo en respuesta a los repetidos ataques del régimen terrorista hutí contra el Estado de Israel y sus civiles, incluido el lanzamiento de misiles tierra-tierra y vehículos aéreos no tripulados hacia territorio israelí en los últimos días”, indicaron las Fuerzas de Defensa de Israel en un comunicado.
Fuentes de seguridad vinculadas a los hutíes confirmaron a la AFP que entre los blancos alcanzados figura un edificio municipal en el centro de la ciudad, y señalaron que hay reportes de víctimas, sin dar un balance preciso.
Por su parte, la cadena de televisión Al Masirah, controlada por los rebeldes, aseguró que los bombardeos golpearon una estación de la empresa petrolera estatal y una central eléctrica en el sur de Saná.
Los hutíes, apoyados por Irán, han lanzado repetidamente misiles y drones contra Israel desde 2023, cuando estalló la guerra en Gaza.
El grupo insurgente sostiene que sus ataques buscan expresar solidaridad con los palestinos.
La mayoría de las ofensivas hutíes han sido interceptadas por las defensas israelíes, pero han provocado una cadena de represalias militares en Yemen.
El pasado 17 de agosto, el ejercito israelí ya había anunciado el bombardeo de “una infraestructura energética” en la región de Saná, “a una distancia de unos 2.000 kilómetros de Israel, en pleno corazón de Yemen, contra una infraestructura energética utilizada por el régimen terrorista hutí”.
En Yemen, una fuente de la Defensa Civil citada por la televisión Al Masirah reportó que la agresión afectó la central de Haziz. En esa ocasión no se reportaron bajas.
Además de atacar Israel directamente, los hutíes han extendido sus operaciones contra embarcaciones que consideran ligadas al Estado hebreo en el mar Rojo y el golfo de Adén, lo que llevó a Estados Unidos y Reino Unido a intervenir militarmente a inicios de 2024 para asegurar las rutas marítimas.
Aunque en mayo los insurgentes alcanzaron un alto el fuego con Washington para frenar la escalada naval, prometieron mantener su ofensiva contra barcos israelíes.
*Con información de AFP