¿A quién se le ocurre llamar al Papa a la mitad de una audiencia pública? Estos espacios de los miércoles son aprovechados por ciudadanos comunes para tener un momento en compañía del Pontífice y la de esta semana no fue la excepción; pero, sin duda, lo que llamó especialmente la atención es que Francisco detuvo a la mitad el encuentro con un grupo de católicos, pertenecientes a la comunidad Lgbtiq+.

El encuentro realizado en la Plaza de San Pedro fue detenido durante un minuto por motivo de una sospechosa llamada que recibió el Papa, de la cual, hasta el momento, El Vaticano no ha ofrecido explicaciones sobre el contenido.

En ese caso, la catequesis sobre los testigos del evangelio que ofreció el Pontífice a los sobrevivientes de abusos sexuales se trató de San Francisco Javier, respecto a quien señaló: “Este santo español es patrono de las misiones, junto con santa Teresita de Lisieux. Francisco nació en Navarra y realizó sus estudios universitarios en París. Allí conoció a Ignacio de Loyola, quien lo acompañó en la experiencia de los Ejercicios espirituales. El encuentro con Cristo que tuvo durante esos días cambió su vida”.

El papa Francisco detuvo durante un minuto la audiencia general celebrada en la Plaza de San Pedro.

Esta no es la primera vez que el Pontífice interrumpe una audiencia pública a la mitad para atender el teléfono, ya que el año pasado sucedió algo similar cuando contestó un mensaje de urgencia de un alto responsable del Vaticano.

Este espacio se acostumbra a que sea aprovechado por los ciudadanos, quienes se toman fotografías con Francisco y, pese a que siempre accede y tiene una buena actitud para recibir a los seguidores, se ha referido en repetidas ocasiones a que la tecnología no debe convertir a las personas en esclavos, por lo que pide moderación con los celulares.

De hecho, el 2019, mencionó en un encuentro con los jóvenes: “Deben liberarse de la adicción a los teléfonos móviles”.

Todos los miércoles el Papa ofrece una audiencia pública en la Plaza de San Pedro a la que pueden asistir todo tipo de personas.

Y agregó: “Cuando te conviertes en un esclavo de tu teléfono móvil, pierdes tu libertad”. Él, también se ha referido a una falta de respeto quienes usan estos aparatos electrónicos durante la misa y en la mesa.

Tras atender la llamada, el Papa continuó con su diálogo con ciudadanos y víctimas que estaban frente a él: “Años después -ha continuado Jorge Mario Bergoglio-, Ignacio, Francisco y otros amigos formaron la Compañía de Jesús, y se pusieron a disposición del Papa para atender las necesidades más urgentes de la Iglesia en el mundo”.

De otro lado, miembros del grupo Lgbtiq+ Mosaiko indicaron que su objetivo fue entregarle un mensaje de unidad y de inclusión a propósito del día internacional contra la homofobia, la bifobia y la transfobia.

“Lo que le venimos a pedir al papa Francisco es que la Iglesia finalmente, digamos, nos dé la bienvenida”, dijo, al término de la reunión, Tiziano Fani Braga, coordinador del grupo Mosaiko.

Y continuó: “Tratamos de ser parte integral de la Iglesia, como todos los creyentes, sin discriminación y para luchar contra todos los tipos de discriminación”.

En la Plaza de San Pedro, el papa Francisco ofreció una audiencia pública a la que asistieron sobrevivientes de abusos por parte de la Iglesia.

Asimismo, en la Plaza de San Pablo, se agruparon cerca de 15 sobrevivientes de abusos sexuales por parte de la Iglesia, quienes viajaron en bicicleta desde Alemania para asistir al encuentro con Francisco, que buscaban llamar la atención de la iglesia para visibilizar la forma en la que el clero lidia con quienes cometen actos de abuso sexual contra menores de edad y adultos.

Las víctimas enviaron un mensaje al Papa pidiéndole “hacer todo a su alcance para garantizar que en todos los sectores de la Iglesia Universal el tema del abuso sexual y espiritual sea visto, enfrentado y prevenido mediante medidas preventivas apropiadas”.

Y que se mande “una clara señal a los perpetradores y obispos que no cumplieron con sus responsabilidades y quienes, hasta cierto punto, todavía hoy no lo han hecho”.