El precandidato a la presidencia de Perú Rafael Belaúnde Llosa salió ileso este martes de un ataque armado contra el vehículo en el que se desplazaba por Cerro Azul, en la provincia de Cañete, al sur de Lima.
El automóvil recibió varios disparos, en un hecho que se presentó en pleno inicio de la campaña electoral.
De acuerdo con el jefe de la policía peruana, general Óscar Arriola, “se ha disparado contra el vehículo y contra él”.
Aunque en redes sociales circularon imágenes del político con sangre en la cara y en su camisa, las manchas corresponderían a esquirlas del parabrisas, impactado por al menos tres proyectiles, y reiteró que no hubo heridos. El vehículo era conducido por un chofer.
Belaúnde, de 50 años, líder del partido Libertad Popular y nieto del expresidente Fernando Belaúnde —quien gobernó Perú entre 1963 y 1968 y luego entre 1980 y 1985—, acudió de inmediato a la comisaría de Cañete para denunciar el ataque.
La policía activó el Plan Cerco en la zona con el fin de ubicar a los responsables. El precandidato aseguró a las autoridades que “no ha recibido amenazas extorsivas o de otro tipo”.
Pedro Cateriano, ex primer ministro y candidato a la vicepresidencia por Libertad Popular, calificó el ataque como “un mal comienzo de campaña”. “Estamos, lamentablemente, atravesando un contexto de actividad delincuencial activa“, dijo a la emisora RPP.
El atentado generó de inmediato reacciones en distintos sectores políticos. Roberto Burneo, presidente del Jurado Nacional de Elecciones, lamentó lo ocurrido y pidió garantizar condiciones de seguridad para el proceso electoral.
“Condeno con absoluta firmeza este acto criminal, reflejo de la violencia que golpea a miles de peruanos cada día. No podemos normalizar estos actos criminales, que deben ser combatidos con toda la fuerza de la ley”, escribió en X Keiko Fujimori, dirigente de Fuerza Popular e hija del fallecido expresidente Alberto Fujimori.
Otros dirigentes, como el exministro del Interior Gino Costa, calificaron el atentado como un hecho “grave” y solicitaron investigaciones rápidas que permitan esclarecer el móvil del ataque, así como la adopción de medidas para proteger a los candidatos.
El ataque ocurre en un contexto de alta criminalidad en Perú, donde las autoridades han reportado un incremento de extorsiones, asesinatos y acciones de bandas delictivas. Este ambiente ha encendido las alarmas ante las elecciones generales del 12 de abril de 2026, en las que Rafael Belaúnde Llosa compite como candidato presidencial de Libertad Popular.
*Con información de AFP