Hay alerta en el departamento del Valle del Cauca por las recientes amenazas contra alcaldes de diferentes municipios de la región, el caso más reciente ocurrió en Dagua, donde las disidencias de las Farc instalaron una pancarta y junto a ella dejaron un mensaje intimidante contra Karol Villarejo, alcaldesa de ese municipio.
“Estamos con un grupo investigativo de Policía Judicial, más inteligencia, que se desplazó para llegar a los actores materiales e intelectuales. Así mismo, apareció una pancarta en la que amenazan a la alcaldesa, ya estamos tomando todas las acciones, vamos a reforzar el pie de fuerza de la jurisdicción con un grupo Goes y así mismo, en la parte investigativa, creemos que son hechos terroristas. Estamos verificando pero la pancarta es del frente del Estado Mayor Jaime Martínez”, fue lo que dijo el uniformado.
La pancarta, que fue dejada cerca al casco urbano del municipio, dice: “Aquí seguimos construyendo la nueva Colombia” y tiene el nombre del bloque occidental comandante Jacobo Arenas.
Como si fuera poco, el alcalde de Cartago, Juan David Piedrahita, denunció que en horas recientes ha sido víctima de intimidaciones que buscan alejarlo del cargo. Las amenazas no solo le estarían llegando a él, sino también a su familia.
“En los últimos días, hemos recibido una serie de ataques y conjeturas, lo que siempre se ha vivido en nuestra hermosa ciudad. Tan así, que el día de ayer se recibió por parte de mi señora madre, mi hermano, hermana y esposa, una amenaza vía WhatsApp donde manifiestan que debo dejar el cargo de alcalde y salir de la ciudad junto a mi familia”, expresó Piedrahita.
Ante esta situación, el mandatario recalcó que “tenemos toda la capacidad profesional para liderar los procesos del municipio. Para que esta administración, que es la que soñamos, más social, que le apunta al deporte, a la educación, a la cultura y al arte, la vamos a seguir realizando”.
Debido a la compleja situación de seguridad en el norte del departamento, el pasado 5 de enero se realizó un consejo de seguridad en Cartago presidido por la gobernadora Dilian Francisca Toro, durante el cual se establecieron lineamientos para reducir los homicidios, luchar contra el microtráfico y establecer corredores de seguridad.
Por este motivo, tanto la Policía como el Ejército Nacional ha reforzado la seguridad en el departamento, especialmente en las zonas rurales de los municipios que es donde tienen especial injerencia las disidencias de las Farc y grupos al margen de la ley que viven del negocio de la extorsión y del narcotráfico.