La investigación por el atentado contra el senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, ocurrido el pasado 7 de junio en Bogotá, entró en una fase determinante.
Así lo confirmó, para medios de comunicación, el director de la Policía Nacional, general Carlos Fernando Triana, quien aseguró que las autoridades están cada vez más cerca de identificar plenamente a los determinadores del crimen, cuya planeación apunta directamente a estructuras armadas ilegales.
Desde el día del atentado, Miguel Uribe permanece internado en la Fundación Santa Fe, tras recibir tres disparos, por parte de un menor de edad de 14 años. El joven, que fue capturado y confesó haber recibido una oferta de 20 millones de pesos por atacar al político, fue clave para dar inicio a una compleja investigación, que hasta ahora ha dejado seis capturas y diferentes indicios sobre la organización criminal detrás del hecho.
Entre los detenidos figura alias “El Costeño”, señalado como uno de los cerebros del atentado, y alias “Gabriela”, una joven de 19 años, quien habría transportado el arma utilizada y verificado la zona antes del ataque. Posteriormente, fue enviada a Florencia, Caquetá, para ocultarse y, presuntamente, recibir entrenamiento por parte de estructuras ilegales.
Según la Policía, esta ubicación no es casual, pues la zona está dominada por el bloque Teófilo Forero, brazo armado de las disidencias de la Segunda Marquetalia, grupo al que se atribuye la autoría intelectual del atentado.
“La instrucción era que llegara al Caquetá para recibir entrenamiento y protección. Esa zona está dominada por esa organización armada”, explicó el general Triana. En declaraciones a El Tiempo, el oficial recalcó que el atentado no fue un hecho aislado, sino el resultado de una planeación meticulosa en la que participaron actores de distintas regiones del país, como Bogotá, Meta y Caquetá.
Cabe destacar, que en total, desde el momento del atentado contra el Senador, se han realizado más de 248 diligencias judiciales, las cuales incluyen análisis de cámaras, interceptaciones, entrevistas, allanamientos y seguimientos técnicos.
Además, se ha contado con el apoyo de agencias internacionales, lo que ha permitido consolidar pruebas contra los implicados y avanzar en la identificación de los autores intelectuales del hecho.
Triana también reveló que hay al menos dos personas clave por capturar y que ya están plenamente ubicadas. “Hay un hilo conductor claro. Nos faltan unos dos por capturar, pero los tenemos plenamente ubicados. Vamos a llegar hasta la última consecuencia”, afirmó.
Además de los autores materiales, la Policía tiene como prioridad ubicar a los posibles financiadores, facilitadores y planificadores del crimen. “Seguimos de forma muy detallada en el camino hacia la captura de los determinadores del atentado. No es solo una prioridad institucional, sino una obligación con la democracia”, indicó Triana.