La noche del viernes Cali recordó por qué es llamada la Capital Mundial de la Salsa. La ciudad le ha rendido homenaje a ello durante décadas, construyendo una cultura alrededor de este género. Es por eso que el Estadio Pascual Guerrero se vistió de gala con los artistas que hacen parte del Tour Viva la Salsa, entre los que se encuentran Óscar de León, Los Hermanos Lebrón, La Sonora Ponceña, El Grupo Niche, Jerry Rivera y Rubén Blades.
Aunque todos son importantes exponentes del género, la llegada de este último, el Poeta de la Salsa, causó gran conmoción en el público caleño, especialmente en los más pequeños, quienes desde hace un tiempo se prepararon para recibir con un emocionante video al cantautor panameño.
Los pequeños amantes de la salsa, quienes hacen parte del Semillero de Niños Melómanos, Nueva Guardia, le contaron al intérprete de Privilegio cuáles eran sus canciones favoritas, además con pasos de baile y al son de los instrumentos le demostraron su gran admiración.
En la tarde del viernes, acompañado de sus seguidores más jóvenes, el cantautor y abogado realizó las pruebas de sonido, para el anhelado concierto del estadio sanfernandino.
El cantante aprovechó los momentos de descanso para conversar con los melomanitos caleños, quienes le compartieron el gusto por su música, tomarse fotos y tener algunos autógrafos. Además, el cantante tomó esta oportunidad de compartir con los niños para aconsejarlos.
“El maestro brindó un espacio exclusivo para los niños en la tarde, cantó por cuarenta minutos para ellos, mientras hacía su prueba de sonido y además estuvo conversando y aconsejándolos para que no dejen de estudiar”, cuenta Stephanía López, directora y fundadora del semillero.
El Semillero de Niños Melómanos, La Nueva Guardia, es una apuesta que busca mantener la cultura salsera que identifica a la ciudad, el proyecto que nació durante el confinamiento, a causa de la pandemia por el Covid- 19, es gratuito para todos los niños de la ciudad y más allá de tener como objetivo formar el oído musical, el grupo es un espacio de formación cultural para la población infantil.
“No le decimos a los niños qué música está bien o mal. Lo que nosotros hemos construido es una metodología innovadora de aprendizaje con la que los niños conocen de geografía, política, religión, naturaleza, gastronomía, entre otras; todo esto utilizando diversas expresiones del arte como la promoción de la lectura, obras de teatro y más”, explica Stephanía López, directora y fundadora del semillero.
Maestro que inspira
Además de la fama de Blades es importante reconocer que más allá de los ritmos pegajosos, que no pasan de moda, las letras de Rubén son fuente de inspiración para aquellos que creen que es posible un cambio. Un ejemplo de esto es el semillero de jóvenes melómanos, el cual ha utilizado álbumes como Siembra o Maestra Vida como fuente de aprendizaje musical y cultural.
“Él ha sido inspiración para este proyecto y ha estado presente durante todas las clases. Los niños del semillero saben quién es Manuela, Ramiro, Carmelo, Juana Mayo, Adán, García, Rubén Blades, porque identifican su contexto con él”, cuenta López.
A pesar de que el colectivo está inspirado en la obra del maestro Rubén Blades, López y las dos antropólogas que la acompañan en el proyecto no se imaginaron que los niños pudiesen tener un momento tan cercano con el cantante. Desde hace un año buscaron la manera de enviarle un video de saludos al maestro, para darle la bienvenida a Colombia, acción que emocionó al cantante de Amor y Control y decidió invitarlos a su prueba de sonido para conocerlos.
“Que el maestro compartiera el video en sus redes sociales es una oportunidad de visualización del proyecto, que es autosostenible, y que requiere de apoyo para seguir construyendo desde la cultura”, cuenta López.
Rubén Blades compartió este sábado, en su cuenta de twitter, fotografías de su presentación del viernes, dándole las gracias a Cali