La violencia en el fútbol es algo que desafortunadamente se presenta a menudo en los estadios del mundo, siendo en esta ocasión, en la liga mexicana femenina.
Un hecho encendió la polémica en redes sociales durante el encuentro entre Bravas de Juárez y Xolas de Tijuana, un partido correspondiente a la quinta jornada de Apertura 2025, pues dos jugadoras pasaron del juego a los golpes.
Esta pelea se registró en el estadio Olímpico Benito Juárez a tan solo 20 minutos de haberse iniciado el encuentro. Una jugada por el balón entre Miah Zuazua, de Juárez, y Natividad Martínez, de Tijuana, terminó en jaloneos.
Lo que parecía un simple roce de jugada, terminó en un momento lleno de empujones, golpes y agarradas de cabello, hecho que desató la gresca en el campo de juego entre las jugadoras de ambos equipos.
Al llevarse a cabo esta acción, la árbitra del partido, Erika Monserrat González, no dudó en mostrarle la tarjeta roja a las dos jugadoras que iniciaron esta pelea, dejando a los clubes con 10 antes de la primera mitad.
Violencia en las canchas del país
Este tipo de actos no son ajenos a la liga colombiana, pues de igual forma es común que se presenten estos tipos de roces al interior del campo de juego, siendo uno de los más recientes el ocurrido entre Atlético Nacional y La Equidad.
Previo a la pelea, en el minuto 69 del compromiso, el arquero del visitante, Luis Marquínez, ya había visto la tarjeta roja.
Esto fue luego de que en una acción de juego, el guardameta derribara al jugador rival Santiago Gómez, haciendo que este se cayera a pocos centímetros del área y evitando que pudiera avanzar y marcar el gol.
Ya sobre el final del compromiso se produjo una falta hacia un jugador del Nacional y, posteriormente, un defensor de La Equidad, al intentar despejar el esférico, mostró su molestia golpeando con el balón a Marino Hinestroza, que se encontraba en el suelo. Esto provocó la reacción de los demás jugadores, cuerpo técnico y suplentes.
Brayan Stiven Montaño y Deyson David Copete fueron expulsados por parte de La Equidad, mientras que en Atlético Nacional expulsaron a Dairon Asprilla y a Kilian Toscano, que anteriormente ya había sido sustituido.
Pese a que se llevan a cabo todos los esfuerzos en el mundo para que este tipo de actos no ocurran más, es casi inevitable que estas acciones no se sigan perpetrando por parte de los y las jugadoras al interior del campo de juego.