¡Magistral! Esa podría ser la mejor manera de definir lo que fue el cobro de penal de Luis Suárez en el partido en el que el Barcelona goleó 3-0 al Real Madrid en las semifinales de la Copa del Rey.
Con el partido ya liquidado (2-0), Suárez cobró el penal a lo 'panenka', picando el balón y dejando sin reacción al guardameta Keylor Navas.
Los blaugranas, con este gran resultado, clasificaron a la final de la Copa, que será el 25 de mayo. Su rival saldrá de la llave que enfrenta a Valencia y al Betis.