Tocado tras los clásicos con los que se despidió de LaLiga y la Copa del Rey, el Real Madrid encara en un momento bajo anímico una prueba de fuego ante el Ajax, en la competición a la que nuevamente encomienda todo, la Liga de Campeones, con ventaja de la ida (1-2) y tras mil días de campeón.

Un curso más todo o nada en la 'Champions'. Después de despedirse en tres días de dos competiciones, en un golpe de realidad difícil de asumir al ser asestado por su eterno enemigo, la plantilla madridista busca la novena clasificación consecutiva a cuartos de final de su competición fetiche. El mejor bálsamo a un equipo que ha demostrado sus carencias a la hora de la verdad.