La Asociación para el Desarrollo Integral del Transporte Terrestre Intermunicipal (ADITT) rechazó el anuncio del Gobierno sobre el incremento del precio del diésel para vehículos que no hacen parte del transporte de carga. La medida, según el gremio, pone en riesgo la movilidad de millones de personas y podría afectar gravemente al turismo.
La organización señaló que un aumento en el precio del diésel se traduce en un alza inmediata en los costos operativos, lo que a su vez llevaría al encarecimiento de los pasajes en el transporte intermunicipal.
ADITT advirtió que esta situación afectará directamente a comunidades rurales, estudiantes y poblaciones de difícil acceso, ya que el transporte terrestre es la única opción en múltiples regiones del país.
“Nuestros vehículos no son particulares: son servicio público, regulado, continuo y esencial, que llega a zonas donde no existen otras alternativas de transporte”, indicó el gremio.
En respuesta a la decisión del Gobierno, ADITT pidió establecer una política diferencial que proteja la sostenibilidad del sector y evite que los sobrecostos terminen afectando a los usuarios o provoquen la interrupción del servicio.
Además, solicitó la instalación de una mesa técnica con la Presidencia y los ministerios de Hacienda y Transporte para concertar soluciones que respondan a la realidad operativa del transporte intermunicipal.
Cabe resaltar que este pronunciamiento se da luego de que se conociera que en los próximos días saldrá a la luz el documento de decreto que va a aumentar el precio del diésel a paridad del valor internacional.
Así lo anunció el ministro de Hacienda, Germán Ávila, durante la presentación del Marco Fiscal de Mediano Plazo.
Según el ministro Germán Ávilael, de 1,35 millones de vehículos que usan diésel, de ellos,“360.000 corresponden a lo que se conoce como camionetas o transporte de lujo, y estos vehículos están recibiendo también los subsidios que implican mantener estabilizado el precio del diésel”.