El gobernador del Cauca, Jorge Octavio Guzmán Gutiérrez, realizó un llamado urgente al presidente Gustavo Petro Urrego y a la comunidad internacional para que ayuden a enfrentar la grave situación de violencia que atraviesa el departamento, tras registrarse más de 17 ataques en distintos municipios durante las últimas dos semanas.
Y es que la presión armada de las disidencias de las Farc supera la capacidad institucional del Cauca, al punto que ahora hay municipios que son controlados militarmente por los integrantes de este grupo armado al margen de la ley.
Por eso, en una carta abierta, fechada el 19 de noviembre de 2025 en Popayán, Guzmán alertó que los recientes ataques de los alzados en armas, al mando de Iván Mordisco, han puesto en riesgo a la población civil, la misión médica, los niños, los adultos mayores y a quienes sostienen la vida diaria en el territorio.
De ahí que el mandatario fue categórico al afirmar: “Esta realidad no puede normalizarse, ni justificarse en la historia de violencia de nuestro país y de estos territorios”.
De acuerdo con el documento, la capacidad operativa del departamento ha sido desbordada, por lo que se requiere presencia real, efectiva y contundente del Estado colombiano. De hecho, este miércoles una comerciante murió en los cinco ataques a la fuerza pública que se presentaron en diferentes municipios caucanos.
Por eso las solicitudes urgentes al Gobierno Nacional son siete: aumento de capacidades militares y de reacción, refuerzo permanente de la Fuerza Pública en las zonas más afectadas, que los soldados y militares están más capacitados y dispuestos a proteger a las comunidades.
Asimismo, acciones preventivas en corredores estratégicos, en especial sobre la vía Panamericana, eje vital de la economía del suroccidente, militarización permanente de esta carretera para garantizar movilidad y seguridad de miles de ciudadanos y transportadores, también la protección reforzada a la misión médica y líderes sociales, además de seguridad para el personal institucional que opera en terreno.
“Igualmente, pedir una mayor coordinación de alto nivel en el territorio, reuniones interinstitucionales con presencia física de los ministerios encargados, adelantar una misión internacional de verificación para supervisar el respeto al DIH y los derechos humanos en el departamento y adelantar las acciones integrales contra el reclutamiento y la violencia rural”, planteó el gobernador del Cauca.
También se plantea una inversión social y proyectos para transformar los territorios, de ahí que Guzmán elevó sus solicitudes no solo al Presidente, sino también a embajadas, organismos multilaterales y misiones de verificación, dejando claro que la situación requiere atención global.
Este llamado no es un asunto menor, en estos momentos ya son cinco frentes de las disidencias de las Farc que tienen presencia en el Cauca, y como quedó evidenciado este miércoles 19 de noviembre, los alzados en armas fácilmente atacan a la fuerza pública en cualquier parte del territorio, quedando atrapadas las comunidades. En Jambaló, por ejemplo, la guardia indígena evitó una masacre durante el cruento hostigamiento a la estación de Policía.