En una operación que recordó los lazos de hermandad forjados durante la búsqueda de los menores desaparecidos en la selva, el Ministerio de Defensa Nacional y las Fuerzas Militares desplegaron una misión especial para llevar la Navidad a una de las zonas más remotas y ancestrales del país: el Araracuara.
Más de tres mil regalos, destinados tanto a niños como a adultos de esta población mayoritariamente indígena, partieron desde Bogotá para aterrizar en la compleja pista de esta región del sur de Colombia.
La carga, que incluía desde juguetes tradicionales hasta prendas de vestir, representó un esfuerzo logístico de gran magnitud para alcanzar los resguardos de las etnias Andoke y Huitoto.
Una logística por aire y tierra
El viaje comenzó a bordo de un imponente avión Hércules, encargado de transportar las toneladas de detalles navideños.
Tras aterrizar en la difícil pista del Araracuara, la misión continuó en helicópteros BlackHawk.
Sobrevolando el majestuoso cañón del río Caquetá, las aeronaves llegaron hasta los puntos más cercanos a los asentamientos indígenas.
Lo más significativo de la jornada fue ver nuevamente a uniformados y miembros de las comunidades indígenas trabajar hombro a hombro.
En una imagen que evocó la histórica “Operación Esperanza”, ambos grupos se unieron para cargar sobre sus hombros los sacos de regalos, sorteando las dificultades del terreno para asegurar que ningún habitante se quedara sin un detalle en estas fechas.
El reencuentro con la historia
La elección del Araracuara para esta celebración no es fortuita. De esta zona son originarios los cuatro hermanos Mucutuy, los niños que sobrevivieron 40 días en la selva tras el accidente de su aeronave el 1 de mayo de 2023.
El mismo lugar donde comenzó aquella angustiante búsqueda fue hoy el escenario de una celebración llena de risas y juegos.
La actividad contó con una presencia muy especial: María Fátima Valencia, abuela de los menores Mucutuy, quien participó activamente en la entrega de los detalles.
La mujer compartió la jornada con Carmen Alicia Mera Lasso, esposa del Ministro Pedro Sánchez Suárez, quienes juntas repartieron muñecas, balones, tenis, ropa y carros de juguete.
Un día para el recuerdo
Entre dinámicas, música y juegos, el día se transformó en una experiencia inolvidable para los habitantes de este territorio considerado sagrado.
Para muchos niños de las etnias Andoke y Huitoto, la llegada de estos obsequios representa la única oportunidad de recibir un regalo nuevo en el año, dada la distancia y el costo de transporte hacia esta región apartada.
Al caer la tarde, el balance fue de satisfacción mutua. Los líderes indígenas expresaron su agradecimiento por haber recibido de manera anticipada la Navidad, mientras que los funcionarios del Ministerio de Defensa y los militares destacaron la importancia de hacer presencia institucional a través del bienestar y la alegría.
Con esta jornada, el Estado busca no solo entregar objetos materiales, sino fortalecer la confianza con las comunidades amazónicas, recordándoles que, a pesar de la distancia geográfica, el país sigue presente en sus territorios ancestrales.
Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.