El Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente (Dagma) en conjunto con las organizaciones No Más Colillas Colombia, Equilibra y Coltabaco, llevaron a cabo una jornada de limpieza de colillas en el barrio Granada, al norte de Cali, entre las carreras 4 y la 9 y entre las calles 12 y 17.
Esto se hizo a través de la iniciativa ‘Cali NO es un Cenicero’, que en cinco meses ha recolectado un total de 28.000 colillas. En esta ocasión de Granada, se instalaron más de 30 colilleros masivos y 10 interactivos a lo largo de sus calles.
Varios adultos fumadores del sector pudieron disponer sus colillas de manera adecuada e interactuaron con el squad que estuvo presente en más de 30 jornadas de educación y sensibilización para incentivar el uso de los colilleros.
El Dagma junto a las otras tres organizaciones destacan que las colillas son residuos difíciles de recolectar y procesar por su tamaño, composición y forma de uso.
Alrededor del mundo, se desechan 18 mil millones de colillas cada día. Esta es una razón por las que considera que estrategias como ‘Cali NO es un Cenicero’ deben ser replicadas en distintos sectores de la capital del Valle del Cauca y en otras ciudades del territorio nacional, porque así consideran que se educa a los fumadores adultos sobre la importancia de la adecuada disposición de las colillas de cigarrillo.
“El trabajo y esfuerzo de distintos sectores de la sociedad, que priorizan la sostenibilidad como el eje transversal que guía sus actuaciones, logra resultados extraordinarios dentro de la educación de los fumadores adultos y la protección del espacio público”, expresó Silvia Barrero, directora de Asuntos Corporativos para el Clúster Andino de Philip Morris International – Coltabaco.
Y es que Cali, después de Bogotá y Medellín, recientemente se ha convertido en la tercera ciudad de Colombia en que este programa tuvo su implementación, con el propósito de obtener espacios más limpios y visualmente agradables. Con estos resultados ya son más de 160.000 colillas que se recogieron entre Bogotá, Medellín y Cali.
Una de las razones por as que la iniciativa ha sido un paso importante es porque ha generado una cultura en la que los habitantes de Cali cuenten con un rol activo y positivo para el cuidado de sus calles, así como un mayor entendimiento del impacto socioambiental que pueden generar pequeños cambios en sus actuaciones.
“Con el cierre de esta fase, los colilleros masivos instalados permanecerán en la zona para mantener espacios limpios y seguir educando sobre la correcta disposición de colillas. Este esfuerzo busca consolidar una cultura ciudadana que proteja el medio ambiente y el espacio público”, concluyó el No Más Colillas Colombia, Equilibra y Coltabaco.