A qué juega el técnico del América? Y no me refiero a lo que hace Juan Carlos Osorio con los jugadores en la cancha. De eso mejor no escribir. Hablo de lo que hace por fuera. De todos los hilos que a la sombra, bajo una falsa postura de transparencia, mueve para tratar de alcanzar sus propios intereses.

Nunca se atreve a hablar con la prensa más allá de una conferencia post partido. No. Prefiere hacerlo subrepticiamente, agazapado en las trincheras de los chats privados para lanzar ‘bombas’ noticiosas que los periodistas finalmente ponemos a retumbar sin importar adónde van dirigidas las esquirlas.

Fue así como le dijo a un periodista de Medellín que dirigiría hasta gratis a la Selección Colombia en el resto de su penosa andadura rumbo a Catar contra Bolivia y Venezuela. Incuso hasta por un año sin cobrar un peso. Y cuando se lo preguntaron en público, no tuvo la personalidad ni la valentía para sostenerse en lo que había dicho a escondidas para que otros lo pusieran a sonar. Y claro, las noticias no se guardan, nos enseñaron a los periodistas. Y la prensa, consciente o no, termina sometida a su juego, aunque no obligada.

Y tan contradictorio y fuera de los cabales de la sobriedad es su discurso, que en las sombras se ofrece sin reparos ni sonrojos moviéndole la silla a Reinaldo Rueda y en las luces afirma que está ligado con convicción y afecto al proyecto de un ‘nuevo América’ que él mismo se inventó y al que, también sin reparos y sonrojos, le auguró una Liga y una Copa Libertadores en solo un par de años.

Osorio no necesita un jefe de prensa, porque él es su mejor promotor. Y no propiamente con resultados ahora, porque no lo acompañan, sino con maniobras por debajo de la mesa con personajes de su mismo mundo que le hacen la pared para avanzar en su juego, ayer en México, luego en Paraguay, hoy en América, mañana quién sabe dónde. Ojalá que en la Selección Colombia no. Por fortuna, hay quienes no le siguen su juego. Lo contó mi colega y amigo Gabriel Meluk hace poco en su columna: el 'Mister', como le dicen, lo llamó para buscar su apoyo y la propaganda que le ayudaran a llegar al banquillo de la Tricolor. Y por estos lados también llamó a otro amigo y colega para que le tendiera el tapete para llegar en su momento al Deportivo Cali.

¿Adónde estará apuntando Osorio si no se da lo de la Selección? Tiene un plan B. Seguro. Y un plan C. Y ninguno de ellos es América. América es de donde está agarrado hasta que le prendan la lámpara en otro escenario.

Aunque si yo fuera Juan Carlos Osorio, hace rato me hubiera ido del América. Porque uno no está donde ya incomoda. Donde quien te paga no confía en tus capacidades ni estilo y te cuestiona públicamente. Y donde tu trabajo no genera empatía con quienes gastan dinero en una boleta.

Quedarse allí es un desgaste innecesario para Tulio Gómez, para el mismo Osorio y para una hinchada que es la gran perdedora de la evidente y, por supuesto, ya pública confrontación que sostienen el máximo accionista rojo y el entrenador risaraldense. Esa es una relación tóxica, como bien lo dijo Pacho Vélez el jueves en Espn. Un matrimonio que no se divorcia porque cuesta mucho dinero, como lo acotó en ese mismo espacio Ricardo Henao. Pero lo cierto es que Tulio no ve la hora de zafarse de Osorio. Y Osorio, Osorio... ¿a qué juega el técnico del América?

@cjotapolania