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Estos diez cultivos podrían transformar al Valle del Cauca

La Cámara de Procultivos de la Andi presentó en Cali un estudio sobre el agro en el país, en el cual se determinó que hay ciertos productos promisorios para la región, teniendo en cuenta la demanda, precios y potencial.

7 de mayo de 2017 Por: Redacción de El País

El aporte de la agricultura a la economía del Valle ha venido en descenso en los últimos años y su participación pasó de 5,6 % del Producto Interno Bruto (PIB) en el año 2006 a 4,8 % en el 2015.

En estos mismos años, gremios y empresarios locales han hablado de la importancia de que el Valle se convierta en la despensa agrícola del país, por su vocación para producir frutas. Hoy en día la caña de azúcar ocupa unas 230.000 hectáreas del territorio departamental, mientras que otros cultivos como las frutas apenas llegan a 30.000 hectáreas.

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Pero aún así, sigue sobre la mesa la oportunidad que tiene la región de cambiar o mejor ampliar este panorama como una alternativa de desarrollo del departamento, mucho más ahora en que se necesitan alternativas para el posconflicto.

570
mil toneladas sumó la producción frutícola del Valle en el año 2015, según la Secretaría de Agricultura del departamento.

La Cámara de Procultivos de la Asociación Nacional de Empresarios (Andi), presentó en Cali, recientemente, un estudio sobre el agro en el país, en el cual se determinó que hay 10 productos promisorios para Colombia, teniendo en cuenta la demanda, precios y potencial. Estos son: piña, aguacate, papaya, fresa, tomate, zanahoria, sandía, cacao, mango y palma, con mayor énfasis en los tres últimos.

María Elena Latorre, directora de Procultivos, considera que el Valle del Cauca tiene todo el potencial para explorar estos cultivos por la riqueza de sus suelos y la capacidad para atender mercados locales y externos.

Según la FAO, Colombia es uno de los países con mayor potencial de expansión de tierras para uso agrícola en el mundo.

En eso coincide Francisco Lourido, director de la Sociedad de Agricultores y Ganaderos del Valle (SAG). “Todos los cultivos que se mencionan tienen potencial y se pueden sembrar en el valle geográfico del río Cauca. Estos no solo generarán riqueza, sino empleo y dinámicas económicas que harán demuestra región la despensa del mundo de la que tanto se habla”.

¿Qué sembrar?

La clave de los 10 productos promisorios en los que se debería concentrar Colombia es que tienen una demanda creciente y buen precio, “es decir, chequeras generosas para pagarlos bien y así tengamos hoy una escala pequeña, el potencial es enorme por la vocación del suelo y la capacidad país”, dijo María Helena Latorre.

El 85 % de la producción de cacao en Colombia es fino, lo que genera mayor demanda internacional y mejores precios
en los mercados.

Solo en cacao, mango, palma, aguacate y piña se podría pasar de US$1400 millones a US$3200 millones en exportaciones en un término de 10 años en Colombia.

En el Valle, según María Milena Banguero, secretaria de Agricultura, se mantiene la apuesta del plan frutícola que este año tiene recursos por $18.000 millones y según la funcionaria, de esos alimentos promisorios planteados por Procultivos, el departamento ha venido impulsándolos casi todos, aunque se ha hecho énfasis en el desarrollo de los clústeres de piña, papaya y aguacate hass.

Después del banano, la uva y los cítricos, el principal cultivo de los promisorios que tiene hoy el Valle es la piña con unas 2000 hectáreas, el aguacate tiene un poco menos y la papaya unas 882 hectáreas (ver gráfico). “Esta apuesta por las frutas se mantiene y se está haciendo según el potencial de los municipios”, dijo Banguero.

Los otros cultivos como la fresa el tomate, zanahoria, sandía, cacao o mango tienen una menor participación en materia de siembra y producción en el Valle del Cauca, pero según la Andi también deben ser una apuesta regional y del país. Por ejemplo, los cultivos que tienen el crecimiento más alto en producción en la última década en Colombia fueron: fresa, papaya y tomate con incrementos de 9,6 %,
6,7 % y 5,7 %, respectivamente.

Debido a una producción mundial menor, el precio del cacao se cuadruplicó desde el 2000. Se espera, además un déficit de 1 millón de toneladas para el 2020 en el mundo.

Asimismo, el mango -Valle tiene 171 hectáreas- es otro de los promisorios que puede asumir el departamento. Se espera que la demanda de esta fruta crezca entre 3,0 % y 5,0 % en los proximos cinco años.

Hasta ahora algunas empresas le están apostando a este negocio. Caso Bengala Agrícola que ya tiene 450 hectáreas sembradas con piña y tiene la meta de llegar a 1000 hectáreas al 2018. Este producto cumple con las características que demanda el mercado internacional y ya se exporta.

Otra experiencia es la de Top Fruits que empezó a sembrar uva sin semilla y ya cuenta con unas 80 hectáreas. Según el empresario Emilio Sardi, el mercado para esta fruta, si se produce con calidad, es inagotable y tiende a tener precios al alza.

Además: 'Ventas del Valle en el exterior crecieron un 17%'.

“Creo que el departamento podría tener 10.000 o 20.000 hectáreas si quisiera. La uva tiene uno de los mercados más dinámicos y debería estar dentro de las prioridades del Valle del Cauca”, dijo.

A estas experiencias se unen otras como Olmué, Nutrium y la misma Grajales que cuenta hoy con 784 hectáreas de frutas, 40 % en papaya y el resto en melón, sandía, maracuyá y carambolo.

Según análisis del economista Mauricio Cabrera, el Valle podría sembrar unas 20.000 hectáreas nuevas en los próximos años en frutas, “pero para ello es necesario invertir y que los empresarios se arriesguen”.

0,53
por ciento del PIB invierte Colombia al año en investigación agrícola. En Brasil es 1,76 % y en Chile 1,26 %.
4%
de las tierras agrícolas de Colombia tienen sistema de riego, según investigaciones de gremios del sector.
97
por ciento crecieron los costos de mano de obra agrícola en la última década, según Procultivos.
100%
aumenta el ingreso de los productores que pueden implementar sistemas de riego en Colombia.

Para que el objetivo se cumpla, explicó Harold Eder, presidente del grupo Manuelita, se requieren varias cosas: producir lo que el mundo demanda, cumplir las normas fitosanitarias y lograr buenas prácticas para ingresar a los mercados internacionales.

A esto adiciona Álvaro Palacio, gerente de Asohofrucol, se requiere acompañamiento del productor para obtener las certificaciones y poder exportar. “El mango Keitt tiene potencial en el Valle, pero hay que certificarse. No se trata solo de decir que esto es promisorio, hay que mirar muchos temas y entre ellos respaldar al cultivador”, dijo el directivo, quien considera que con el impulso a la siembra de frutas se cambiará la cara del país.

Cultivadores piden más apoyo

Según Hernán Arango, cultivador de Tuluá, son muchos los problemas que afrontan los pequeños cultivadores y que obstaculizan el desarrollo del agro.

Por ejemplo, tienen poca transferencia de tecnología, dificultades para acceder a los créditos y los golpea más duro los altibajos de precios en el mercado.

“Para tener éxito en el impulso del agro y del plan frutícola se requiere trabajar en toda la cadena: arrancar desde la tierra, el campesino, la tecnología, el transporte y la comercialización”, explicó.

En el Valle del Cauca los cítricos tienen la mayor producción con 144.000 toneladas al año, seguido de la piña con 136.000 y el banano con un total de 108.000 toneladas.

Agregó que “el desarrollo de la agroindustria no es posible si siguen llegando empresas que nos dicen: siembre piña, papaya, fresa o mango que nosotros compramos, pero luego quieren adquirir el producto a precios muy bajos y en ningún momento consideran que el agricultor participe del negocio como inversionista o accionista”.

Para este cultivador, trabajar sobre los cultivos promisorios está muy bien, siempre y cuando haya apoyo para el productor.

A sembrar cacao

Según Fedecacao, en el Valle se produjeron 690 toneladas de cacao y 583 toneladas en el Cauca en 2016.

Este es uno de los productos que se considera más promisorio y que podría servir para el desarrollo del posconflicto. De acuerdo con cálculos de Procultivos, para el 2030 se podrían generar exportaciones por más de US$1000 millones al pasar de 56.000 hectáreas a 350.000 en el país.

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