El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Valle

Artículo

PALMIRA

Cierran hogar comunitario en Palmira por presunto maltrato físico a un niño

La madre de un niño de 3 años denunció que la madre comunitario del lugar "le dio dos reglazos" a su hijo.

5 de mayo de 2018 Por: Redacción de El País Palmira 

El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf, cerró temporalmente un hogar comunitario en Palmira, por presunto maltrato a uno de los niños atendidos en el lugar.

Según se conoció, un equipo de profesionales de la entidad se desplazó hasta el barrio La Benedicta de Palmira donde funcionaba la unidad de servicio, para verificar la denuncia realizada por la madre del menor.

Asimismo, el Icbf informó a través de un comunicado que una de las Defensoría de Familia abrió un proceso administrativo para restablecerle los derechos al niño y brindar acompañamiento a la familia durante la investigación que realice la autoridad competente.

Adicionalmente, indicó que los niños del hogar comunitario serán trasladados a otras unidades de servicio a fin de garantizar su atención.

Lea también: Realizan inspección a 10 detenidos con casa por cárcel en Palmira y solo encuentran a 7

"Ella me le dio dos reglazos que le dejaron hematomas en la pierna derecha"

Angélica Vallejo, de 32 años, es la madre de un pequeño de 3 años de edad al que presuntamente habrían maltratado en el hogar comunitario Manojitos de Rosas, ubicado en el barrio La Benedicta, al noroccidente de Palmira.

Según señaló la mujer, quien es normalista y enseña en un jardín privado, en el mismo sector, los hechos se habrían presentado el pasado 23 de abril cuando el pequeño, que al parecer sufre de estreñimiento, hizo sus necesidades en la ropa.

Sin embargo, ella no se enteró de lo sucedido sino hasta cuando llegó a su casa y encontró al pequeño con marcas en su pierna derecha.

"Como yo trabajo todo el día, tengo una persona que lo recoge y cuando ella me dijo que el niño estaba lastimado le preguntamos qué le había pasado y él nos contó que le habían puesto hielo, después ya nos confesó que le habían pegado con la regla porque se hizo en la ropa", relata Angélica.

De inmediato, agrega, se trasladó a la Fiscalía y a Medicina Legal para denunciar lo sucedido. También acudió a la Comisaría de Familia donde la remitieron al Icbf que decidió cerrar el hogar mientras se adelanta la investigación.

Angélica reveló que ella vivió como inquilina durante dos años en la casa donde funciona el hogar y aunque reconoce que la señora encargada les hablaba fuerte a los niños nunca había tenido conocimiento de que les pegara.

Insistió que hizo la denuncia porque es lo que haría cualquier madre en su lugar.

"Yo he puesto la cara por mi hijo, estoy haciendo lo que cualquier madre haría en mi lugar. De pronto ella lo hizo porque tenía la confianza, pero no era para abusar de su autoridad", dijo haciendo alusión al hecho de que ellos habían vivido en la casa de la madre comunitaria.

"Yo no le hice eso al niño".

Por su parte, doña Ermila Cárdenas, asegura que ella no le causó las lesiones que dice la madre del pequeño.

Reconoció que efectivamente le dio un reglazo, pero en la nalga, y que no es cierto que le quedaran hematomas.

"Yo no le hice eso al niño, si usted se fija bien en la foto, esas son marcas de correa y yo tengo audios de ella donde me dice que le va a dar bien duro por hacerse en la ropa, entonces yo lo que quiero es que investiguen esto. El único error mío es que yo no reviso los niños cuando los traen al hogar", insistió la mujer.

Anota que desde hace 25 años tenía el hogar en ese sector donde la mayoría de las mujeres son madres cabeza de familia.

Y enseñó una lista de más de 50 firmas recogidas entre las madres usuarias del lugar y habitantes del barrio donde le piden al Icbf que reabra el hogar.

"Las madres han presentado un derecho de petición ante el Icbf para que no cierren el hogar, ellas están muy molestas pues saben que las cosas no pasaron así como dice Angélica, una mujer que vivió conmigo por dos años, uno de ellos gratis porque no pagó arriendo, que hasta le serví de fiadora, uno no le paga así a una persona que le ha servido tanto", reitera Ermila.

Manifestó que tenía al niño para hacerle un favor a la madre pues ella ya tenía el cupo completo.

"El niño lo tenía en el jardín donde ella trabaja pero tuvo que sacarlo porque tenía problemas de disciplina, entonces lo trajo acá y yo por hacerle el favor se lo recibí porque yo ya tenía mis doce niños, ahora estas madres no saben donde llevar sus pequeños y se han visto perjudicadas en su trabajo pues no tienen quién se los cuide", sostiene mientras en el lugar luce solitario y triste sin las risas de los niños.

AHORA EN Valle