Agencia Nacional de Tierras entrega a la Minga Cali dos predios en Zarzal, Valle, que eran propiedad del testaferro de ‘Don Diego’

Los predios ‘La Lorena’, de 314 hectáreas, y ‘La Gloria’, de 222 hectáreas, ubicados en el municipio de Zarzal, Valle del Cauca, fueron recientemente adquiridos por la Agencia Nacional de Tierras (ANT) tras haber estado en control por la Sociedad de Activos Especiales (SAE).

Estos predios, que están conformados por 536 hectáreas, eran de propiedad de Jorge Tulio Arango, señalado de ser testaferro del narcotraficante Diego Montoya, alias Don Diego, y también de terceros presuntamente vinculados como testaferros en procesos de ocultamiento de bienes.

Ambos fueron entregados a las comunidades campesinas y afrodescendientes de la Minga Cali, quienes usarán las tierras para la producción de alimentos como cítricos, plátano, maíz y café.

Según la ANT, las recuperaciones de los predios se adelantaron por una operación conjunta con la Policía del Valle, la Defensoría del Pueblo y las autoridades locales, con el fin de que a la Minga Cali se le garantizara la protección de sus derechos al acceso legítimo a la tierra.

“Estos terrenos fueron entregados a comunidades campesinas y afrodescendientes que integran la Minga Cali, cumpliendo los acuerdos pactados y, lo más importante, para que produzcan alimentos como cítricos, plátano, maíz y café”, aseguró Laura Campo, delegada de la ANT, al resaltar que los predios fortalecerán las economías campesinas.

La Agencia resalta que los predios se encontraban en los últimos años bajo ocupaciones sin soporte jurídico válido y presentaban usos no autorizados, contrarios a su destinación.

Tras la captura de Montoya en 2007, su extradición en 2008 y la posterior condena a 45 años de prisión, gran parte de sus bienes fueron entregados al Estado bajo la administración de la SAE.

“La Agencia Nacional de Tierras hizo efectiva la entrega de La Lorena y La Gloria a la Minga Cali, conformada por asociaciones campesinas y afrodescendientes que llevan décadas reclamando acceso digno al territorio”, señala la entidad adscrita al Ministerio de Agricultura.

Jhon Cifuentes, uno de los beneficiarios de esta entrega, expresó su felicidad por convertirse en primera vez en propietario de una tierra.

“Esto es un sueño hecho realidad. Todavía no creemos que sea verdad que estamos en una tierra propia. Nunca como campesinos pensamos que nos devolverían las tierras donde crecimos. Para nosotros es recuperar lo que somos: volver a producir nuestros cultivos orgánicos, sembrar las semillas ancestrales que nos han acompañado toda la vida”, destacó el campesino.

En la misma línea, Irma Mosquera, integrante del Consejo Comunitario Brisas del Pacífico lo celebró. “La felicidad ahora será despertarme cada mañana a las cinco, coger una semilla e ir a sembrarla”.