Españolas prueban por primera vez el auténtico ajiaco en Bogotá: así fue su experiencia

El ajiaco es uno de los platos insignia de la capital colombiana y son varios los turistas que no desaprovechan su paso por Bogotá para probar esta tradicional sopa.

Diferentes restaurantes de la ciudad ofrecen su propia versión de este manjar y varios se han hecho un nombre entre los viajeros, gracias a su exquisita sazón.

Es el caso de ‘La Puerta Falsa’, icónico restaurante que recientemente fue visitado por dos extranjeras españolas, quienes grabaron su experiencia para posteriormente subirla a la plataforma Tiktok.

Según narraron las mujeres, decidieron que su primera vivencia tras aterrizar en Colombia fuera ir a probar este platillo.

En el video que ya cuenta con más de 36 mil ‘me gusta’, las mujeres expresaron su emoción por este suceso, y explicaron su intención de poder conocer una gran cantidad de los sabores del territorio nacional.

“Me encanta”, fue la primera reacción de una de las visitantes. “20 de 10″, complementó su amiga, indicando una calificación muy por encima del promedio a este plato.

En los comentarios de esta publicación se observan otras recomendaciones que los usuarios nacionales les hacen a las viajeras para que continúen su experiencia gastronómica.

Muchos también aprovecharon para darles la bienvenida al país e incluso, señalaron sus graciosas reacciones.

La Puerta Falsa: Tradición y sabor en Bogotá

Durante su video, las mujeres hicieron claridad en que decidieron ir a este restaurante porque se considera un sitio “muy típico”, y en efecto, este lugar ha permanecido llevando comida a la mesa de sus clientes desde su fundación el 16 de julio de 1816.

El portal Taste Atlas, que funciona como guía de viajes en línea, reconoce a ‘La Puerta Falsa’ como “uno de los restaurantes más viejos y más tradicionales en Bogotá”.

Con una calificación de 4.5 estrellas en Google y más de 3400 reviews, este espacio ha pasado ya por ocho generaciones.

Sus platos más destacados serían el ajiaco y los tamales tolimenses, aunque en su amplia carta también se pueden encontrarse envueltos, changua, marquesa y demás platos de la gastronomía santafereña.

Dice la historia que este restaurante ya ofrecía sus servicios antes del grito de Independencia; sus inicios se remontan a un pequeño negocio de aguapanela que alimentaba a los ciudadanos que salían de misa.

Varios presidentes, expresidentes, exfuncionarios y periodistas habrían llegado a saciar su hambre con sus platillos.

Incluso, se cree que la mismísima Manuelita Sáenz visitaba este lugar para conseguir los dulces favoritos de Simón Bolívar.