Escapa al frío y la naturaleza: el mejor destino ecoturístico de Cundinamarca cerca de Bogotá

Cundinamarca tiene 116 municipios y está integrado por 15 provincias, muchas de las cuales tienen importantes atractivos turísticos y ecológicos que atraen cada año a miles de turistas.

Uno de estos municipios es Guasca, a 60 kilómetros de Bogotá y uno de los puntos más apetecidos para realizar turismo ecológico. “La riqueza natural de Guasca, con sus montañas y cuerpos de agua, ofrece un entorno perfecto para el ecoturismo y las actividades recreativas en la naturaleza”, se mencionó en la Gobernación.

Gracias a su clima frío se ha hecho muy popular en los últimos años, ya que tiene gran variedad de plantas y animales, por lo que se pueden realizar diversas actividades al aire libre.

“La Laguna de Guatavita es una de las principales atracciones naturales del municipio, ofreciendo un entorno ideal para el ecoturismo y las actividades al aire libre. Esta laguna es un importante refugio de biodiversidad y un espacio de conservación de flora y fauna”, se indicó desde la Gobernación de Cundinamarca.

Este municipio basa su economía en la agricultura de productos como maíz, hortalizas y papa; además, también tiene una gran producción ganadera y de lácteos, por lo que se pueden comprar productos frescos.

Según la Gobernación de Cundinamarca, uno de los puntos más atractivos de Guasca en la reserva natural el Zoque, en la cual hay una gran diversidad de fauna y de flora, así como de senderos ecológicos en los que las personas pueden disfrutar de avistamiento de aves y especies silvestres.

De la misma manera, en este punto de Cundinamarca se crean artesanías que son comercializadas en diferentes partes del país, especialmente los realizados con tejidos y madera.

La capilla de Siecha, declarada monumento nacional, también está en los alrededores del municipio. Este es un sitio histórico para el departamento ya que en ese territorio vivió el cacique Guatavita y el pueblo muisca, antes de que fueran ocupados por españoles en la Conquista.

Por ello, además de tener gran riqueza natural, también es reconocido por tener arquitectura histórica que permite conectarse con la cultura.

Una de las edificaciones emblemáticas en Guasca es la Iglesia de San Jacinto, la cual se construyó en el siglo XVIII y es un símbolo arquitectónico de la ciudad.

Además, Guasca se reconoce por tener diferentes actividades culturales como las festividades de San Jacinto, diferentes ferias y eventos religiosos destacados como procesiones. La música, la danza y las artesanías locales son aspectos importantes de la vida cultural del municipio, según indicó la Gobernación de Cundinamarca.