El pueblito del Valle del Cauca, ‘el sol más alegre de Colombia’, que es poco conocido y encanta con sus tradiciones

Ubicado al norte del Valle del Cauca y bañado por las aguas del río La Vieja, Cartago es conocido como “el sol más alegre de Colombia”, un apodo que hace honor a su clima cálido, con temperaturas que rondan los 29 °C en promedio.

Este municipio sirve de punto de encuentro entre las extensas llanuras cañeras del Valle del Cauca y las montañas cafeteras de los departamentos de Risaralda y Quindío.

Fundada en 1540 por el mariscal Jorge Robledo, esta localidad también es llamada “Villa de Robledo” en memoria de su fundador. Su historia colonial, su fervor religioso y su gente amable hacen de esta ciudad un destino ideal para quienes buscan destinos que evoquen cultura y fe.

Entre sus principales atractivos destacan la Catedral Nuestra Señora del Carmen y la Iglesia de Guadalupe, templos reconocidos por su imponente arquitectura y su valor histórico. Los interesados en el arte sacro pueden visitar el Museo de Arte Religioso, que conserva piezas litúrgicas y obras que retratan la devoción de la región.

Para quienes disfrutan los planes tranquilos, Cartago también ofrece espacios para disfrutar de la naturaleza y la vida al aire libre. En el Parque Bolívar, ubicado en el corazón del municipio, es común ver familias y amigos compartiendo una tarde de descanso bajo la sombra de los árboles.

Además, a pocos kilómetros de allí, los visitantes pueden recorrer el Jardín Botánico del Quindío, un paraíso natural considerado uno de los más hermosos del eje cafetero.

Los visitantes que buscan una experiencia más artesanal pueden acercarse a la Plaza de Mercado, donde abundan los productos típicos y las coloridas artesanías locales.

Otro lugar imperdible es el Taller de Bordado, símbolo de la identidad cartagüeña, donde los visitantes pueden observar de cerca el trabajo de los artesanos que mantienen viva esta tradición. Y es que las maestras artesanas y su saber ancestral ha posicionado a Cartago a nivel nacional e internacional como una de las mejores expresiones del bordado en el mundo.

Cartago es también una ciudad perfecta para los planes sencillos: hacer un pícnic en sus parques, compartir una comida al aire libre o disfrutar de juegos tradicionales como el ponchado o el minifútbol. Su ambiente tranquilo y cálido la convierte en un destino ideal para disfrutar sin prisas.

La distancia entre Cali y Cartago es de aproximadamente 140 kilómetros, un recorrido que puede tardar entre dos y tres horas según el medio de transporte y el tráfico.