¿Se avecina una derrota histórica? Lo que prevén los expertos para el petrismo en las elecciones de octubre

Un panorama oscuro se vislumbra para los candidatos del Pacto Histórico y sus aliados en la próxima contienda electoral regional del 29 de octubre, en la que se elegirán alcaldes, gobernadores, concejales, diputados y miembros de las JAL, pues son varios los factores que juegan en su contra.

Entre estos factores, comenta Patricia Muñoz, directora de posgrados de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Javeriana Bogotá, están las situaciones negativas por las que ha atravesado el presidente Gustavo Petro relacionadas con el cumplimiento de la agenda que se había propuesto de cambio y de reformas sociales; los escándalos asociados a su hijo (Nicolás Petro); las denuncias sobre el papel de su hermano (Juan Fernando); el caso de Laura Sarabia, jefa de su gabinete; el de su embajador en Venezuela, Armando Benedetti, que le restaron puntos en términos de imagen.

Además, los estudios de opinión pública han venido demostrando un descenso en los niveles de respaldo al Gobierno.

“Todas esas situaciones asociadas a las confrontaciones del Gobierno con diferentes sectores, no solo políticos, sino con gremios y asociaciones que tenían que ver con las reformas que venía adelantando, pueden generar un clima de menor respaldo para brindar apoyo electoral a los candidatos del Pacto Histórico en las regiones”.

Otro punto, añade Muñoz, es que no se ha visto un Pacto Histórico organizado, estructurado a nivel regional, definiendo sus candidatos, haciendo sus cuadros de liderazgo regional, escogiendo los mejores, promocionándolos. “La situación nacional ha absorbido al Gobierno y pareciera que el partido a nivel regional ha tenido menor presencia y este retraso en el trabajo organizativo, seguramente, también va a afectar a las campañas que pueden ser menos exitosas en octubre”.

A todo esto se agrega que “en el Pacto Histórico hay una especie de guerra civil en las regiones ocasionada por la escogencia de candidatos y conformación de listas, situación que se había manifestado en las elecciones del Congreso de 2022″, interviene el politólogo Luis Eduardo Martínez, magíster en Ciencia Política.

Es el típico comportamiento de los partidos tradicionales, acota Martínez, quien complementa que “en ese ambiente les resulta más difícil a las fuerzas gubernamentales diseñar su actividad electoral”.

Los integrantes del Pacto Histórico, en opinión del analista político Jaime Andrés Wilches, docente del Politécnico Gran Colombiano, deben abandonar sus egos y concentrarse en una campaña que se encargue de mostrar un proyecto político más allá de la figura de Gustavo Petro. De no suceder esto, “el personalismo del Presidente y su afán por casar peleas, terminará haciendo daño en las regionales”.

Las elecciones de octubre van a ser una especie de plebiscito o referéndum en contra o a favor del Gobierno, apunta el politólogo Juan Pablo Ortega, del Grupo Democrítica, de la Universidad Javeriana de Cali. “Todas las fuerzas están confluyendo a que hayan coaliciones que, justamente, permitan de alguna manera, premiar o castigar al Presidente. Pero yo creo que las alcaldías de las principales ciudades se las va a llevar el antipetrismo”.

Agrega el politólogo que la casa Char se quedará con la Alcaldía de Barranquilla; que no hay nada qué hacer contra ‘Fico’ Gutiérrez, que se quedará con la de Medellín (la que hoy ostenta Daniel Quintero, a quien se asocia con la figura de Petro). Cree que Juan David Oviedo tiene altísimas posibilidades en Bogotá por más que salgan otros candidatos. “Allí tiene muy difícil ganar el Pacto Histórico con Gustavo Bolívar u otra persona, porque metieron el veneno de la segunda vuelta y en esta, lo que uno ve es que todas las fuerzas antipetristas se van a poner de acuerdo para derrotar al representante del oficialismo”.

¿Qué pasaría en Cali y el Valle?

A nivel local el panorama también es bastante oscuro para el Pacto Histórico, en opinión del politólogo Álvaro Benedetti, docente de la Universidad Javeriana Cali, quien argumenta que lo más probable es que la mala imagen del alcalde Jorge Iván Ospina le juegue una mala pasada a quien quiera arroparse con las banderas de ese grupo.

“Jorge Iván en la campaña, y tras ser elegido Gustavo Petro presidente, se declaró petrista y en su momento eso fue bueno para el mandatario nacional, pero hoy puede ser malo para él y para quien el Presidente le interese que gobierne en Cali”, explica Benedetti.

Además, agrega el docente, “no veo en Cali una figura fuerte en el Pacto Histórico, un candidato que tenga la capacidad de movilizar masas, ni que sea ciento por ciento carismático, que además de los votos de la izquierda pueda atraer o arañar los votos del centro. Creo que hay un terreno de oportunidad muy grande para los candidatos de centro o de centro derecha y quizá, para uno que represente la derecha, por el lado del Centro Democrático o de Cambio Radical”.

A nivel departamental comenta que está muy fuerte Dilian Francisca Toro para la Gobernación y no ve a alguien del ‘Pacto’ que le pueda competir. Pero, se puede prever, dice, que bajo las sombras, pudiese haber algún tipo de acuerdo, pensando en garantizar gobernabilidad en el Congreso, entre ciertos representantes del Pacto Histórico, no del ala radical, y la exgobernadora. “Eso podría suceder, al fin y al cabo, el marco de las reformas sociales no se ha resquebrajado del todo porque Dilian no se ha querido abiertamente bajar del bus”.

Por otra parte, Juan Pablo Ortega considera que en el departamento quien le puede competir y ganar a la ‘baronesa electoral del Valle’ es el empresario Tulio Gómez, si él acepta estar en una coalición donde el Pacto Histórico no sea su única sombrilla. “Además de ser un ‘outsider’, es un tipo carismático, nuevo en la política, que le puede dar la pelea a Dilian”.

Sobre la Alcaldía, dice, la pelea estará entre Roberto Ortiz y Alejandro Eder, pero aparecerá una figura que representará al Pacto Histórico con los ‘verdes’ y Colombia Renaciente. Hasta hace unos días se decía que era Mábel Lara, “que también es un poco ‘outsider’: nueva en la política, mujer carismática, que puede aglutinar las bases populares que el petrismo no ha logrado aglutinar hasta ahora”. Sin embargo, este domingo Mabel aseguró que no participará en estas elecciones.

“Deninson Mendoza, falló, Danis Rentería, falló, Elmer Montaña, falló. Será oficialismo contra oposición, como en todo el país. Entre Eder y Ortiz la derecha tiene que definir a quién apoyar. En el Valle Petro es fuerte y al no tener un candidato igual de fuerte acá va a jugar con lo que tenga. Y creo que al Presidente no le disgusta Tulio. Pero Éder está fuertísimo y Ortiz no creo que saque menos de 200.000 votos. Entonces, esto va a estar interesante”.