¿Y los ciudadanos?

Para reclamar por las afectaciones al orden público que atentan contra la convivencia en Cali siempre se hace un llamado a las autoridades, pero poco se reflexiona sobre el papel de quienes habitan la ciudad.

En los primeros siete meses del 2022, en la capital de la alegría se han registrado 35.706 casos de porte ilegal de armas, 16.860 de porte de sustancias psicoactivas, 2137 de riñas y 1190 de tenencia de celulares robados, además de 574 homicidios.

Y a diario se evidencian comportamientos como violaciones a las normas de tránsito, irrespeto hacia las autoridades, invasión a los carriles del MÍO y reacciones violentas contra funcionarios y bienes públicos.

La cantidad de hechos ilegales, de infracciones y delitos que se presentan en Cali desborda la capacidad de las autoridades para mantener el orden.

Pero nunca se reflexiona sobre la responsabilidad de los ciudadanos en el comportamiento que permite a una sociedad vivir de manera civilizada.

Las autoridades deben velar por los derechos de los caleños y combatir la delincuencia, pero es necesario que quienes viven en Cali asuman su obligación de aportar para proteger la convivencia y la tranquilidad en su ciudad.