Las vías rurales
En el tiempo que le resta a la actual administración municipal se deben cumplir los compromisos pactados con los caleños, incluidos los que tienen qué ver que las adecuaciones de las carreteras que conectan a los corregimientos caleños.
El mal estado de las vías rurales de Cali, la mayoría sin pavimentar o deterioradas, es un problema que crece con los años sin ser atendido por la Administración Municipal.
La comunidad asegura que las promesas se han incumplido y pese a que el actual mandatario ofreció $6.000 millones para el mantenimiento de las vías en zonas como La Castilla, La Elvira, Pichindé y El Saladito, la infraestructura vial no ha sido intervenida.
Aun cuando la obligación del Gobierno local es velar por el bienestar de todos sus ciudadanos, han tenido que ser los mismos pobladores de estos corregimientos quienes reúnan recursos para mitigar el riesgo que representa el mal estado de estas carreteras.
Ahora, el Secretario de Infraestructura se ha comprometido a realizar mantenimiento en algunos sectores rurales durante el 2023, sin embargo, sostiene que la pavimentación total no será posible.
Es necesario que los funcionarios municipales comprendan que la zona rural hace parte de Cali y no merece seguir en el olvido, sus habitantes tienen derecho a vivir en entornos adecuados y contar con una infraestructura de vías moderna.
En el tiempo que le resta a la actual administración municipal se deben cumplir los compromisos pactados con los caleños, incluidos los que tienen qué ver que las adecuaciones de las carreteras que conectan a los corregimientos caleños.