Oasis
Está bien asumir responsabilidad por lo que haces, pero culparte te frena, te desalienta y te enferma.
Siga a EL PAÍS en Google Discover y no se pierda las últimas noticias

26 de sept de 2022, 11:30 p. m.
Actualizado el 17 de may de 2023, 01:04 p. m.
Millones de creyentes han sido mal educados por años y años en la terrible escuela de la culpabilidad.
En la mayoría de las misas se repite sin cesar un dañino estribillo: “Por mi culpa, por mi culpa, por mi grandísima culpa”.
Algo horrible que debe erradicarse ya que para el alma y la mente es nefasto alimentar sentimientos de culpa.
Está bien asumir responsabilidad por lo que haces, pero culparte te frena, te desalienta y te enferma.
Afortunadamente hay sacerdotes y pastores que no apoyan la fe en la culpa y les hacen un gran bien a sus fieles.
Entiéndelo y no te castigues más rumiando tus errores; reconócelos y perdónate para siempre.
Deja de flagelarte sin piedad por lo que hiciste o dejaste de hacer. No culpes ni te culpes. Sé compasivo.
Perdonarte mejora tu autoamor y te ayuda a seguir adelante disfrutando el ahora serenamente.
Sigue en Instagram @Gonzalogallog

Conferencista y escritor. Autor de 25 libros, dos de ellos para Mexico. 25 años trabajando medios como prensa, radio y tv. Lleva más de 25 años escribiendo para El País.
6024455000
