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Entre el Clasicismo y el Romanticismo: un recorrido musical profundo con la Filarmónica de Cali en la Sala Beethoven
La presentación propone un programa cuidadosamente diseñado que articula un diálogo musical entre la creación contemporánea y el repertorio clásico.
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8 de oct de 2025, 02:45 a. m.
Actualizado el 8 de oct de 2025, 02:45 a. m.
El próximo jueves 9 de octubre, a las 7:00 p.m., la Sala Beethoven se vestirá de gala para recibir a la Orquesta Filarmónica de Cali, dirigida por la destacada directora invitada Elizabeth Vergara. Esta presentación, que contará con la participación especial de la violinista María del Mar Castaño, propone un programa cuidadosamente diseñado que articula un diálogo musical entre la creación contemporánea y el repertorio clásico, estableciendo así un puente entre distintas épocas y estilos que han marcado la evolución de la música occidental.
La apertura estará a cargo del estreno absoluto de Song of Cicadas (Canción de las Cigarras), una obra de la compositora caleña Daniela Torres Piedrahita, conocida artísticamente como Manderine. Esta pieza se distingue por su carácter íntimo y profundamente simbólico, a través del cual se representa el renacer de la figura femenina, la ‘mujer cigarra’, que emerge de un prolongado silencio para reclamar su derecho a la luz y a la plena expresión. El discurso musical transita desde atmósferas contenidas y reflexivas hasta un clímax sonoro de gran luminosidad y carga emocional, configurando una experiencia estética compleja y transformadora que invita a la introspección y la renovación.
Posteriormente, la orquesta interpretará la Sinfonía en Do mayor, D. 589, de Franz Schubert, compuesta entre finales de 1817 y principios de 1818. Esta sinfonía, si bien menos difundida que otras obras emblemáticas del compositor como la “Inconclusa” o la ‘Gran Sinfonía’, constituye un punto clave en la evolución estilística de Schubert. Su lenguaje musical sintetiza con equilibrio las influencias mozartianas y beethovenianas, desplegando una riqueza melódica, modulaciones dinámicas y un lirismo intenso que imprimen una profundidad emocional notable.
En esta obra, Schubert establece claros paralelismos con la tradición de Haydn y Rossini, evidentes en la orquestación y el tratamiento temático, en particular en el uso destacado de los instrumentos de viento madera que introducen el Allegro inicial. El Scherzo denota una mirada hacia Beethoven, reafirmando la capacidad del compositor para integrar tradición y originalidad en una síntesis expresiva donde la espontaneidad, la emotividad y una sutil melancolía convergen.
El primer movimiento comienza con un inicio solemne, marcado por acordes que evocan a Beethoven, seguido por una apertura del Allegro que recuerda el estilo de Haydn a través de los vientos. El desarrollo melódico evidencia el característico don de Schubert para la melodía y su habilidad para explorar modulaciones hacia tonalidades lejanas, retornando siempre con suavidad a la tonalidad principal. Un elemento destacado es la inserción de una melodía en canon —primero entre clarinete y fagot, luego entre oboe y flauta— justo antes del cierre de la exposición, que aporta una dimensión contrapuntística refinada. La coda concluye con un tono grandioso, evocando el legado de sus predecesores clásicos.
El movimiento lento presenta una confrontación dinámica entre un tema principal suave y delicado y un pasaje enfático, marcado por un ritmo poblado de tresillos, donde la influencia de Haydn resulta patente. Estos elementos contrastantes se equilibran hacia una atmósfera final de perfecta tranquilidad. El Scherzo siguiente exhibe un carácter claramente beethoveniano, prefigurando la grandiosidad de la posterior Sinfonía en Do mayor, conocida como la ‘Gran Sinfonía’. El movimiento final, ligero y festivo, despliega una orquestación brillante y una interacción fluida entre violines y vientos. Las frases punteadas y el ritmo incesante reflejan el estilo efervescente y vital que caracteriza a Schubert en esta etapa de su producción musical.
Aunque esta sinfonía no alcance la monumentalidad de sus obras mayores, representa una composición de gran mérito, que revela la riqueza melódica, el refinamiento armónico y la destreza orquestal del compositor, consolidando su lugar en la tradición clásica y anticipando el romanticismo.
El programa concluirá con la interpretación del Concierto para violín en La mayor, K. 219, conocido como el Concierto Turco, de Wolfgang Amadeus Mozart, interpretado por la violinista María del Mar Castaño. Compuesto en 1775, este concierto es una de las piezas más destacadas del repertorio violinístico, reconocida por su equilibrio formal, inventiva temática y brillantez técnica que demanda un alto nivel de virtuosismo al solista. La obra incluye elementos distintivos del estilo galante, como un breve adagio en el primer movimiento y motivos ‘a la turca’ en el rondó final, reflejo del interés europeo por las sonoridades exóticas. La escritura para violín evidencia el profundo conocimiento del instrumento que poseía Mozart, quien fue tanto un intérprete virtuoso como un innovador compositor.
Esta programación ofrece un encuentro fecundo entre la música contemporánea y el legado clásico, invitando a los asistentes a un recorrido auditivo en el que tradición, innovación y profundidad expresiva convergen de manera armoniosa. La interpretación que brindarán la Orquesta Filarmónica de Cali, su directora invitada y la violinista solista promete no solo una ejecución técnica rigurosa, sino también una experiencia artística intensa y enriquecedora.
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