La errática comunidad internacional

Nos sorprenden los pasos que da la comunidad internacional, que lejos está de la verdadera integración

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Foto de referencia. Migración Colombia tramitó la deportación de la colombiana Echeverría desde Suiza. | Foto: Archivo de El País

27 de feb de 2022, 11:40 p. m.

Actualizado el 18 de may de 2023, 04:44 a. m.

Nos sorprenden los pasos que da la comunidad internacional, que lejos está de la verdadera integración, de la mancomunidad de esfuerzos y recursos para procurar escenarios de igualdad, y de las oportunidades y progreso para los países mas débiles. En lo que vemos actualmente, parece que la conciencia expansionista atrae a los líderes mundiales, quienes ponen especial atención para contar con aliados, en donde claramente el territorio entra a jugar un papel muy importante.

Así es como las potencias se dedican a imponer influencias en los diferentes continentes, en donde podemos apreciar con claridad que la imposición de ese juego deja víctimas y produce afectaciones dolorosas que tenemos que lamentar, pues surgen países que se toman como animales de laboratorio, en donde se les priva de posibilidades de juego dentro de la comunidad internacional, y lo que es más lamentable, de elementos de autodeterminación, pues cualquier decisión debe consultar intereses de países superiores, que son los que terminan imponiendo las condiciones y los escenarios de actuación.

Ejemplos, muchos. No solo es el caso de Ucrania, cuyos habitantes deben padecer en extremo la tensión diaria de la invasión. Son también aquellos países cuyos dirigentes irresponsablemente se han alineado a un determinado régimen, con el objeto de buscar apoyos para perpetuar un poder y para patentizar un totalitarismo de Estado, en donde los ciudadanos pierden cualquier papel, quedando en estado de hambre, ante cuyos dirigentes no les queda otro camino que afiliarse a una potencia y recibir su orientación, para no verse sometidos a perder el poder militar que los ampara y sostiene, como Venezuela, Nicaragua y muchos otros.

Esta situación ha hecho que fracasen también los escenarios de integración de las subregiones, como lo hemos visto en Suramérica donde el Pacto Andino es una cosa muy pobre. Fuera de eso, organismos como la ONU y la OEA, están cada vez mas lejos de cumplir con su papel, pues dentro de los asociados con mayor poder no existe un ánimo verdadero de integración y solidaridad, lo que termina colocándolos en un plano de intereses particulares, que les impide avanzar y cumplir una misión altruista.

Este panorama lleva al mundo a retroceder, y a que las necesidades del planeta queden estancadas, o lo que es peor, en franco retroceso. Tenemos la necesidad profunda de un nuevo orden mundial, para lo cual necesitamos líderes dispuestos a hacer un aporte efectivo y positivo por la humanidad. Requerimos con urgencia líderes humanistas y no líderes guerrero, sedientos de poder, como en las épocas de bárbaras naciones.

Directora de El País, estudió comunicación social y periodismo en la Pontificia Universidad Javeriana. Está vinculada al diario EL País desde 1992 primero como periodista política, luego como editora internacional y durante cerca de 20 años como editora de Opinión. Desde agosto de 2023 es la directora de El País.

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