El pais
SUSCRÍBETE

Inicio

Mundo

Artículo

En su último discurso, Benedicto XVI dijo: "amar a la Iglesia significa tomar decisiones difíciles y dolorosas, tengan siempre en mente el bienestar de la Iglesia, no de uno mismo". | Foto: EFE

MUNDO

Prima lejana del papa emérito Benedicto XVI rechazó su herencia, ¿por qué?

El papa emérito tiene pendiente una demanda civil en su contra y quien acepte la herencia deberá pagar la eventual indemnización si resultara culpable.

3 de junio de 2023 Por:

Luego de la muerte del papa emerito Benedicto XVI, Joseph Aloisius Ratzinger, se empezó a buscar a sus herederos. Aloisius fue el papa número 265 de la iglesia católica y el séptimo soberano de la Ciudad del Vaticano, desde abril en 2005 hasta su renuncia, el 28 de febrero de 2013. Desde entonces, su reemplazo ha sido el papa Francisco.

Luego de la muerte de Benedicto XVI, el 31 de diciembre de 2022, a la edad de 95 años; Georg Gänswein, su antiguo secretario y actual albacea, empezó a buscar a los herederos de Ratzinger.

Inicialmente, indicó que Benedicto XVI no dejó ningún testamento sobre sus propiedades personales y, según la ley del Vaticano, estas deberían ser repartidas a sus familiares más cercanos.

El Papa Francisco visitaba con frecuencia a Benedicto XVI, en su residencia del Vaticano.

En esa búsqueda, Gänswein halló a cinco allegados de Ratzinger en Alemania. De acuerdo con el antiguo secretario, son ancianos reconocidos como primos de Joseph, quienes además fueron notificados por carta el pasado mes de abril que serían beneficiarios de la herencia.

Aunque para muchos esta idea suena muy atractiva, una de sus primas, una mujer de 88 años de edad, rechazó la propuesta.

Según la agencia católica alemana KNA y en Bayerischer Rundfunk, la hija de la mujer aseguró que ni ella ni su madre están interesadas en aceptar tal remuneración. Al parecer, no quieren dolores de cabeza, ya que también tendrían que hacerse cargo de una demanda civil que dejó pendiente el papa emérito y quien acepte la herencia deberá pagar una indemnización si este resulta culpable.

Se trata de un proceso civil que pretende determinar si cuando fue arzobispo de Munich, a principios de los 80, hizo todo lo posible para impedir que un sacerdote pederasta cometiera abusos varios años después.

En ese proceso también están encausados otros cuatro eclesiásticos. El proceso que se abrió en junio de 2022 en el tribunal de Traunstein (Alemania), está relacionado con el caso de un hombre de 38 años que había sido abusado cuando tenía 11 o 12 años por el sacerdote Peter H.

El antiguo secretario del papa emérito Benedicto XVI, indicó que encontró a cinco de sus herederos, sin embargo, una de ellas no quiso aceptar la herencia.

En el proceso se busca determinar si años antes la arquidiócesis de Munich, Joseph Ratzinger (su arzobispo entre 1979 y principios de 1982) y su sucesor Friedrich Wetter, encubrieron a Peter H., en cuyo caso podrían ser responsables de los abusos que cometió años más tarde.

Aunque Benedicto pudo haberse negado a defenderse, con lo cual el proceso civil habría concluido inmediatamente, en noviembre, menos de dos meses antes de su fallecimiento, anunció su disponibilidad a declarar en el proceso.

En febrero del año pasado, ya había hecho pública y documentado su versión sobre lo ocurrido, según la cual Peter H. llegó a Munich en 1980 desde otra diócesis, para recibir tratamiento psiquiátrico, pero no para trabajar en una parroquia.

“No sabía que fuera un abusador, ni tampoco que ejerciera actividad pastoral en Múnich. No resultan denuncias o acusaciones” contra H. durante los años en los que él estuvo al frente de la arquidiócesis.

Entretanto, el próximo 20 de junio está prevista una visita judicial, que ya había sido aplazada una vez debido a la búsqueda de los herederos.

El papa emérito tiene pendiente una demanda civil en su contra y quien acepte la herencia deberá pagar la eventual indemnización si resultara culpable.

Según el tribunal, si ningún heredero acepta el legado, el procedimiento contra Joseph Ratzinger se cerraría, y solo seguiría adelante la causa contra los otros demandados.

Mientras tanto, la arquidiócesis de Munich y Freising explicaron que se harían cargo de “pagar una indemnización adecuada en reconocimiento del sufrimiento del demandante y a encontrar una solución apropiada para las eventuales reclamaciones por daños y perjuicios”.

Finalmente, Georg Gänswein, indicó que los otros cuatro primos de Benedicto XVI no han dado a conocer su decisión.

AHORA EN Mundo