La ruta que recorrió el general Alzate antes de su secuestro en Las Mercedes

El oficial recorrió el río Atrato y llegó hasta Las Mercedes. Una posible desmovilización habría sido el motivo de su viaje.

Cuando el general Rubén Darío Alzate escuchó la decisión de los tres guerrilleros se sintió el hombre más confundido del mundo. Dicen en el caserío Las Mercedes que no se opuso, se tomó la cabeza con las manos y se despidió de un niño que estaba en el atrio de la iglesia amarilla, centrada en este caserío a orillas del río Atrato. Se fue aguas abajo. Dicen que el General, mientras se subía a la panga de civil y no con el camuflado que lo ha acompañado por más de 30 años, repasó la anchura del río.Encuentre aquí: Cinco preguntas clave sobre el proceso de paz luego del secuestro del general Alzate"Él no sabía que pasaba. Él había estado parado en la iglesia por treinta minutos como esperando. De pronto llegaron estas tres personas, hablaron con él y se lo llevaron", explica un habitante del caserío en que la energía llega por horas y en el que sus habitantes se turnan para ver televisión en el único aparato que hay en el pueblo. El General miró hacia atrás, como queriendo deshacer los pasos de la ruta que lo llevó al secuestro: el río Atrato. Se perdió entre las aguas desde el domingo pasado a las 3:30 p.m., aunque las Fuerzas Militares desplegaron un operativo con más de 700 hombres para hallarlo a él y sus acompañantes. Las autoridades desconocen el motivo del viaje sin seguridad. Sin embargo, fuentes de Inteligencia Militar precisaron a El Colombiano que un emisario de las Farc lo había contactado porque el cabecilla de esta estructura se entregaría con más de 100 guerrilleros."Él ya tenía experiencia en eso. El desmovilizó toda la estructura del Ejército Revolucionario del Pueblo, ERP, en los Montes de María. Eso lo hizo igual a cómo se movió en Las Mercedes. De civil. Fue un logró militar", dice el investigador.La ruta del generalEl Atrato es una autopista de agua donde las pangas de madera suben y bajan con su motor e interrumpen la tranquilidad de los caseríos asentados a orillas del río. Entre estos caseríos está Las Mercedes, un poblado de 15 casas de madera y poco más de 100 habitantes que sobreviven del cultivo de yuca, plátano y ñame. La ruta que siguió el General, antes de su secuestro por el Frente 34 de las Farc, estuvo precedida de una carretera destapada que sale de la Brigada 15, recorre el centro de Quibdó atestado de motos, vendedores de fruta y cacharros, y se interrumpe abruptamente en el malecón, donde pescadores y conductores de panga y barcos muestran la identidad del pueblo chocoano. Por ese malecón salió el oficial. Se fue en una panga como cualquier civil, tanto que al llegar al caserío fue confundido con un extranjero. Se fue sin uniforme porque según la alcaldesa de Quibdó, Zulia Mena, su trabajo era desarrollar un trabajo social con las comunidades. "El está comprometido con sacar adelante el Chocó. Es una persona que les ayuda a las comunidades y está pendiente de ellas. Por eso se fue de civil, para generar confianza", afirma Mena. Sin embargo, en las comunidades dicen que no tenían cita con él. Que no sabían que él iba hacia la zona y que además en varias ocasiones les solicitaron a las autoridades militares que no hacieran esos trabajos sin concertar porque los ponían en riesgo. Esa inquietud fue transmitida el pasado 8 de mayo por Fanny Rosmira Salaz, representante legal del Consejo Comunitario Mayor de la Asociación Campesina Integral del Atrato. "Frente a la realidad social que vive nuestro país, nos oponemos y no avalamos que los proyectos sociales que vayan dirigidos a nuestras comunidades se realicen por medio de instituciones militares".Expresan los campesinos de estas comunidades que cuando cualquier grupo armado, legal o ilegal, llega a sus territorios, los problemas no tardan en aparecer. Por eso no entienden cómo el General, a pesar de esta petición, se dirigió a estos lugares para hacer labor social, y más por el río Atrato, la autopista por donde las Farc tienen el control de la movilidad. Muchas veces, desde las orillas selváticas del turbio Atrato, los guerrilleros salen de la tupida manigua y sacan una bandera roja a cualquier barco que se mueva por el río. "Ahí usted se tiene que orillar para que ellos vean quién es usted y qué lleva. Se tiene que orillar y si no lo hace, hasta lo pueden ejecutar".Dicen los pescadores que hasta en el puerto se hacen los milicianos que le sirven a alias Chaverra, jefe del Frente 34 de las Farc. "Hasta por ustedes ya habían preguntado pero se dieron cuenta de que eran periodistas y se relajaron", menciona un conductor de una panga. Últimas llamadas del general AlzateA las 8:00 a.m. del domingo, antes de salir para la zona, el general Alzate llamó al gobernador del Chocó, Efraín Palacios, para que lo acompañara al recorrido. "Yo le dije que no podía acompañarlo porque tenía que hacer otras cosas acá en la región", dijo Palacios. El general también llamó a su esposa, Claudia Farfán. No le dijo hacia dónde iba ni qué iba a hacer. "Yo me enteré del secuestro a las 8:00 p.m. Esto es muy duro", manifestó su esposa, quien pidió la liberación del militar y los otros secuestrados.