¿Es viable la militarización de Buenaventura?

El ministro de Defensa, Iván Velásquez, anunció la adopción de varias medidas para combatir la ola de violencia que vive Buenaventura, entre ellas, la realización de un consejo de seguridad en esa ciudad, que contará con su presencia, los días jueves 6 y viernes 7 de julio.

“Realizaremos presencia no solo para este consejo del jueves, sino en sectores y comunas que han venido siendo afectadas en la ciudad, de manera que podamos, al final de los dos días de trabajo, mostrar un balance más positivo en lo que significa la recuperación de la tranquilidad en la ciudad”, dijo el titular de la cartera de Defensa.

El Ministro Velásquez también anunció que se va a ampliar la capacidad para el control urbano con Fuerzas Militares.

“Igualmente, la Policía ha dispuesto que se evaluará, con personal de inteligencia y de un incremento de policías, cómo hacer más efectivas órdenes de captura. Requerimos que a este esfuerzo también contribuya la Fiscalía General de la Nación”, dijo.

Hasta el momento no se conocen más detalles del lugar y las horas en que se realizará el consejo de seguridad en Buenaventura.

¿Es viable la militarización?

Luego de que la Gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán, realizara un llamado urgente al Gobierno Nacional para que militarice Buenaventura y gran parte de su zona rural, conocedores de la problemática que se vive en la zona sostienen que esta medida no beneficiará a la ciudad como se espera, pues ya se ha ejecutado antes y la violencia ha continuado.

“Estamos haciendo un llamado respetuoso desde el Valle del Cauca al ministro de Defensa, Iván Velásquez, para que se militarice todo el Distrito Especial de Buenaventura de inmediato. Es urgente proteger a la comunidad y acabar con las economías ilegales”, dijo la Gobernadora.

Según sus palabras, “Buenaventura necesita que el Ejército llegue, ocupe todo el territorio, proteja a la comunidad y se quede. Es necesario que la comunidad sepa que la autoridad la ejerce el Estado y no las bandas criminales”.

“Esta militarización es algo temporal. Los grupos, cuando este tipo de intervenciones ocurren, lo que hacen es ocultarse, esconder sus armas y no salir a las calles”, afirmó Juan Manuel Torres, coordinador de la oficina Pacífico de la Fundación Paz y Reconciliación.

Para Torres, así se militarice la ciudad, problemas como la extorsión no se terminarán ya que “las bandas mandarán a un joven, menor de edad y vestido de civil, a recoger el dinero producto de este delito. Irá a las tiendas, a las carnicerías, y a donde la señora de la esquina y con este recurso de la extorsión diaria los grupos ilegales se seguirán financiando mientras las autoridades patrullan las calles”.

Según el experto, esta no es una solución que comparta, pero entiende que se tiene que tomar con el objetivo de darle tranquilidad a las personas en la calle.

Uno de los problemas que señala Juan Manuel Torres es que la Armada Nacional patrulla por las quebradas y los ríos y solo ingresa hasta dos kilómetros en el territorio, mientras que el Ejército solo controla la vía de acceso a la ciudad, por lo que quedan muchos lugares sin custodiar.

“Sabemos que la situación de Buenaventura requiere de una inversión estatal que incluya una extraordinaria inversión social, pero en este momento se debe priorizar la vida y la seguridad de los habitantes del Puerto. Hay que fortalecer las capacidades de identificación y captura de los cabecillas criminales. Nuestros esfuerzos institucionales se quedan cortos sin el apoyo del Gobierno Nacional”, dijo la Gobernadora del Valle.

“Esa medida de la militarización ya se ha intentado en muchas partes del mundo. Por ejemplo, no olvidemos lo que pasó cuando Jair Bolsonaro ordenó ocupar las favelas en Brasil para perseguir las pandillas. Eso es flor de un día porque genera más resentimiento y lo que eran tres bandas, al estar allá el Ejército, se convertirán en más”, afirmó Camilo González, presidente del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Indepaz.

“Considero que hay que hacer algo más estructurado y el Estado tiene que cumplir con los compromisos que ha hecho con las organizaciones sociales, con la inversión, con la juventud y debe mantener la política de los diálogos”, añadió el analista en temas de paz y violencia.

González dijo que está probado que el mandar sola a la Fuerza Pública, sin otros planes de intervención social, es un fracaso. “No tiene sentido mandar al Ejército a combatir solos un problema de criminalidad social. Eso debe ser tratado de otra manera”.

“Hay que identificar a los jóvenes pertenecientes a Los Shottas y Espartanos para conversar con ellos y que tengan procesos de transformación. Esto debe estar acompañado de soluciones más de fondo que le den esperanza a una población que ha estado marginada en un puerto rico, pero donde viven las comunidades más pobres. Hay que complementar el diálogo con soluciones sociales, pues si esto no ocurre, no se logrará nada”, añadió González.