Así fue la fuga de seis jóvenes del Centro de Formación Juvenil Valle del Lili

Los 350 jóvenes infractores de Valle del Lili son custodiados por un promedio de siete agentes de la Policía en cada turno. A pesar de la construcción de un muro perimetral, de aproximadamente seis metros de alto, faltan mejorar sistemas de vigilancia por cámara e iluminación.

Los seis menores que escaparon la noche del pasado martes del centro de formación Valle del Lili, saltando desde una garita de vigilancia, habrían aprovechado una parte del muro perimetral que no está construido justo en la zona donde se encuentra ubicada esa torre de control).La explicación la dio la teniente Liliana López, comandante de la Policía de Infancia y Adolescencia, quien informó además que la fuga se facilitó por los defectos del sistema de cámaras de vigilancia y del alumbrado de la institución.Los 350 jóvenes que se encontraban en el lugar, antes de la fuga de seis de ellos, son custodiados desde el perímetro del establecimiento por 23 de agentes de la Policía que trabajan en tres turnos.Esto significa que, en cada turno, alrededor de siete uniformados se encargan de la vigilancia de 50 jóvenes infractores. Estos uniformados fueron los primeros en reaccionar en la noche de este martes, cuando un grupo de 27 menores se amotinó y se les enfrentó con palos y piedras. El director de la Institución, el padre Guillermo Fulgarín, explicó que hacia las 7:00 p.m. unos jóvenes "se salieron de la sección en la que están asignados e invitaron a los otros a que se unieran al desorden". En total, 27 internos protagonizaron la revuelta, según dijo el comandante operativo de la Policía de Cali, coronel Nelson Rincón."Contamos con la presencia de la Policía de Infancia y Adolescencia, que presta la seguridad de la Institución; además, tuvimos refuerzos de los policías de La María y al final llegó el Esmad, que se encargó de recoger a los muchachos que continuaban por ahí desordenados", dijo el director del centro de formación juvenil. El desorden fue aprovechado por seis jóvenes que no estaban involucrados en la revuelta, para escapar de la institución, al parecer, por medio de una garita de la Policía que se encuentra al lado de uno de los muros que rodea el lugar, de aproximadamente seis metros y el cual no está completamente construido. "Cuando hicimos el conteo y el recuento de los muchachos, faltaban seis de los 350 que habían", señaló el padre Guillermo. En el hecho resultaron heridos un agente de la Policía y un educador, que fueron atendidos en un centro asistencial por lesiones con un objeto contundente. El personero delegado de Menor y Familia, Edward Hernández, aseguró que los jóvenes que se evadieron ya fueron identificados y que, uno de ellos, "había escapado el año pasado".Por su parte, el padre Guillermo Fulgarín afirmó que ya se le dio aviso a los familiares de los jóvenes evadidos, para convencerlos de que regresen y terminen su proceso judicial. Esta es la segunda fuga que se presenta en lo corrido del 2012 en el Centro de Formación Juvenil Valle del Lili. A comienzos de marzo se fugaron seis internos, que aprovecharon la salida de las visitas semanales para escapar de las instalaciones. Dos de ellos fueron recapturados. Cabe recordar que el 13 y 14 de agosto del año pasado, 158 internos protagonizaron la fuga más grande que se ha presentado en ese establecimiento en los últimos años.Una fuente de la Policía de Infancia y Adolescencia aseguró que, a pesar de que se han tomado medidas para mejorar la vigilancia, hay falencias en el sistema de cámaras de seguridad y la poca iluminación del lugar. Además, indicó que "hay una garita que quedó expuesta, porque no se terminó uno de los muros y por ahí los jóvenes aprovechan para evadirse".