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Maharam y Venus han experimentado los beneficios físicos, emocionales y espirituales del yoga. | Foto: Nathalia Acosta, especial para El País

Yoga, un estilo de vida

Esta disciplina puede generar un cambio de actitud en el trabajo, una mejor vida familiar y fortalecer las relaciones sociales.

8 de mayo de 2017 Por: Por Hanner Asprilla y Nathalia Acosta, Integrantes del Semillero de Periodismo UAO- El País

Tras casi 40 minutos de recorrido desde el sur de la ciudad de Cali, en la vía hacia Cristo Rey; lejos del ruido de los carros y la contaminación de la ciudad, en un lugar llamado ‘Yogendra Ashram’, un grupo de personas viven, experimentan, conviven y comparten quizá la más antigua disciplina física, mental y espiritual del planeta: el yoga. Enfocar la atención en la respiración, cautivarse de la tranquilidad otorgada por el silencio y dejarse llevar por el ritmo pausado del corazón son los primeros pasos hacia esta práctica milenaria.
Vivir la vida sin dolor físico y ayudando a los demás es posible, según Maharam, fisioterapeuta de la Universidad del Valle y actual maestro de yoga en ‘Yogendra’. “Es posible brindar el servicio independientemente de la carrera profesional, formación o religión que se practique, puesto que el yoga es felicidad y unión, y juntos, ambos aspectos permiten que la mente vaya más allá, que se olvide el sufrimiento y se desarrolle progresivamente la comprensión”.
El yoga, además de ser una serie de posturas, puede ser una filosofía de vida; un cambio de actitud en el trabajo, una mejor vida familiar, puede fortalecer relaciones sociales y en sí, todo lo que rodea al ser humano en general. Este es un estilo de vida  que sana, cuida y fortalece el cuerpo, la mente y el espíritu mediante la práctica de los ejercicios, la respiración y la meditación.
Las personas que practican el yoga en Occidente lo han implementado en su mayoría con la intención de mejorar su postura, relajarse y aliviar el estrés,  pero para muchos yoguis expertos, esta práctica aborda mucho más que eso: “La práctica del yoga ayuda a aliviar dolores, a mejorar el insomnio pero lo más importante es que te permite estar en paz con tu cuerpo y tu alma entendiendo esta como el principio de todo”, expresa Venus, coordinadora de Yogendra.
Practicado en la India desde hace miles de años, se ha convertido en una alternativa contra el estrés y la ansiedad que causa el ritmo de la vida moderna y, actualmente, se ha logrado posicionar como uno de los sistemas de acondicionamiento físico y espiritual con más seguidores en nuestros días.
¿Es necesario ser vegetariano para hacer yoga?
Aun cuando la mayoría de los yoguis implementan una dieta vegetariana, basada en frutas, legumbres, lácteos, nueces, vegetales y semillas, esta no es un requisito para la práctica frecuente del yoga. Sin embargo, si se desea implementar este como estilo de vida, adentrándose en sus creencias y pensamientos, el vegetarianismo sin duda es un aspecto importante para lograr el equilibrio en el mundo espiritual y demás condiciones que rodean al yoga.
De igual manera, existen diversas razones por las cuales los practicantes y maestros de yoga optan por no ingerir carne en sus dietas alimenticias. Entre estas se encuentran: el principio de la no-violencia, el desarrollo y fortalecimiento de la pureza física y mental, los animales concebidos en igualdad de derechos a los humanos y la preservación de las plantas vistas como energía vital de la vida.

Aventúrese en el yoga

Instrúyase. Primero que todo, es pertinente indagar acerca de grupos de practicantes, o escuelas de yoga, muy a menudo realizan cursos de inducción totalmente gratis.
Simples herramientas. Basta con un lugar tranquilo, alejado de la inmediatez del día a día, una colchoneta y un cojín para realizar las posturas básicas y una buena ‘playlist’ que le ayude a relajarse.
Póngase cómodo. No hace falta más que una camiseta y un pantalón liviano para realizar esta actividad. Recuerde que cuanto más cómodo esté logrará una mayor relajación. Y eso sí, no olvide dejar de lado los zapatos.
Para no olvidar. Despojarnos de lo innecesario nos ayuda a descubrir, valorar y utilizar el potencial personal que albergamos en nuestro interior.

Actividades en Yogendra

Masaje Tailandés Tradicional. En este sistema único del Masaje Tailandés, el practicante realizará una serie de posturas yógicas, palmeando a lo largo de las líneas de energía del cuerpo (“Sen”) y los puntos de presión. Juntas, alivian la tensión muscular, mejoran la circulación, estimulan el sistema inmunológico y equilibran el cuerpo energéticamente.
La Yoga-terapia. Ayuda a desligarse del círculo vicioso: dolor – tensión – miedo – dolor, el cual se encuentra asociado con las enfermedades crónicas. De esta manera, se enseña a aceptar la realidad, comprender la enfermedad y convivir con ella.
Masaje Tailandés Nivel 1 y 2. El Thai Yoga Masaje es un arte de curación que restaura el equilibrio del cuerpo. Esta terapia utiliza el yoga pasivo para abrir líneas de energía en el receptor.
Voluntariado. Durante su estadía, los voluntarios experimentan y se involucran con la vida yóguica; realizando tareas como: cocinar, aprender sobre la jardinería orgánica, el arte y la gastronomía yóguica.
Clases de AcroYoga. Es una combinación entre el yoga acrobático y el yoga en parejas. Mediante el acroyoga se identifica la manera en la cual las acciones repercuten en el movimiento de otras personas.

La práctica del yoga ayuda a
aliviar dolores, a mejorar el insomnio pero lo más importante es que permite estar en paz con tu cuerpo y tu alma.

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