Habla Jorge Cárdenas, el villano de 'La traicionera'
El actor y cantante caleño Jorge Cárdenas interpreta al 'Moro' en la novela de RCN 'La traicionera'. Habló de su papel de villano, de su amor por su esposa, Ana Lucía Domínguez, y de su otra pasión, la música.
El actor y cantante caleño Jorge Cárdenas interpreta al 'Moro' en la novela de RCN 'La traicionera'. Habló de su papel de villano, de su amor por su esposa, Ana Lucía Domínguez, y de su otra pasión, la música.
Amén, dice el actor, cantante y compositor caleño Jorge Cárdenas para agradecer que finalizó el año con amor, salud, trabajo y dándole vida a un personaje que lo motiva. Ahora es Moro en la telenovela del Canal RCN La traicionera, un malandro que lo divierte por su dualidad, que lo ha retado como actor por las dos caras que maneja. Él disfruta creando personajes reales. No le importa si son buenos o malos, blancos y negros, simplemente evalúa si le exigen su interpretación. En este molde entra Moro, un papel que le permite conservar su acento caleño. El teatro es una cosa que lo enamora, incluso considera que es lo más cercano a hacer un concierto. Dice que un escenario teatral es un espacio que le permite evocar su pasión por la música, porque le da ese excitante contacto directo con el público durante su presentación.Se ríe al pensar que el Moro original, el de la versión argentina de la telenovela, fue encarnado por un rubio de ojos azules. Él admite que se aleja de ese prototipo, pero pese a ello no deja de atraer con su carisma a directores y jefes de casting. Una atracción aún más poderosa ha causado en colegas como Carolina Sabino, Ángela Vergara y Paola Rey, mujeres con las que estuvo relacionado sentimentalmente en distintos momentos de su vida. Hace más de tres años, Jorge conquistó con música y con su sonrisa a la bella Ana Lucía Domínguez. Con esta actriz comparte el set de grabación, su vida y proyectos profesionales. Es su esposa, el motor de su vida y la cómplice de las aventuras que emprende.Después de madurar en su carrera trabajando en proyectos como Las Juanas, Sobrevivir, Clase aparte, La dama de Troya y Zona rosa, sabe que está listo para seguir creciendo en otros espacios. Hace pocos meses hizo teatro en Estados Unidos, experiencia que le agradece en la vida y le abrió las puertas de nuevos mundos. ¿Qué lo atrajo de su papel en La traicionera?Es una telenovela distinta a todas, parece una serie extranjera donde pasan muchas cosas en cada capítulo. La gente ha visto que no es la típica historia donde los protagonistas luchan por su amor. Con humildad lo digo, esta historia está bien contada y mantiene enganchado al público.¿De dónde ha sacado ese lado oscuro, de villano, del Moro?Moro es el personaje del que más me he enamorado en mi carrera porque tiene los matices de una persona real, no sé si es un tipo bueno o malo y eso pasa en la vida real. La gente no es buena las 24 horas del día ni es buena para todo el mundo. Lo más complicado es que Moro es un guache, no tiene escrúpulos, y yo no soy así. Gracias a Dios es un personaje convincente.¿Cómo fue el reencuentro con el acento caleño?Esa ha sido la parte fácil de hacer el Moro. Pude rescatar mis raíces vallecaucanas y allí encontré muchos elementos para construirlo. Moro ha ido calando en el público como lo hizo con Alcaraván en La dama de Troya...Ambos son de regiones especiales y son personajes llamativos. A diferencia del acento caleño, me costó mucho el llanero. Era un territorio y una idiosincrasia desconocida para mí. Me pegué de la música llanera, y ahora me encanta esa cultura.Después de varios años en la actuación, ¿qué tipo de personajes busca ahora?Me enamoran personajes como Alcaraván, retadores. Para ese personaje me engordé 10 kilos y me tocó aprender a bailar joropo y a tocar cuatro. Tuve que montar a caballo para competir en carreras cuarto de milla y hacer coleo. Esos son los retos que me encanta, No solamente decir letras y cosas medianamente coherentes, sino construir personajes que son, en realidad, personas.¿Ha disfrutado trabajar junto a su esposa, Ana Lucía Domínguez?Estamos felices porque compartimos más tiempo juntos y le estamos apostando a lo mismo. Podemos almorzar y compartir más cosas. Este trabajo a veces te aleja de lo que más quieres: la familia.¿Qué tan cómplice es de Ana Lucía?Mucho. Acabamos de llegar de Estados Unidos, en donde ella estaba protagonizando una telenovela. Irme implicó que yo renunciara a un personaje en un proyecto en Colombia, pero valía la pena por estar juntos. Era separarnos casi un año y no lo iba a hacer. Aproveché mi estadía allá para grabar mi disco y hacer una temporada de teatro con un concepto diferente. Hablando de música, después de lanzar el sencillo Tengo con Jiggy Drama, ¿qué tiene preparado para el público?Lancé la balada Una vez más que ha estado rotando por emisoras. La música es un trabajo muy difícil pero hay que seguirlo haciendo y seguir creyendo. En febrero lanzaré el álbum con un show y una propuesta nueva.En La traicionera le permitieron mezclar sus facetas de actor y cantante Sí, hice la canción del cabezote. No sólo la canto sino que la produje. Eso me hizo feliz, me dio otra razón para enamorarme más del proyecto, pues vivo enamorado de la música.