Festival de 'Sundance', el 'hijo' de Redford que revolucionó la industria del cine
El actor y productor Robert Redford recuerda que empezó mostrando en un teatro tal vez 150 películas y creció hasta el punto en que ahora se tienen 20 teatros y 70.000 asistentes.
El actor y productor Robert Redford recuerda que empezó mostrando en un teatro tal vez 150 películas y creció hasta el punto en que ahora se tienen 20 teatros y 70.000 asistentes.
Lo que empezó como un laboratorio, sin fines de lucro, se constituyó a la vuelta de algunos en uno de los emprendimientos más revolucionarios de la industria del cine. Lea también: Robert Redford, el hombre de las propuestas indecentes, habla de su nueva película
Empezó en los años 80 cuando Robert Redford sintió que esas ansias de independiencia que lo dominaron desde niño debían notarse en el cine.
Nunca quise ser parte de alguna organización grande o seguir sólo una manera de pensar. Creo que la independencia es una parte de mi vida.
Para mí la palabra Independencia es una expresión de la libertad: la libertad de elección, libertad de tomar sus propias decisiones, para hacer su propio trabajo. Siempre he respetado ese concepto y cuando empecé a Sundance, era crear un mecanismo para esas libertades a desarrollar.
Y ese hijo llamado Sundance Creció fuera de control. Cuando empezó sólo había un teatro mostrando tal vez 150 películas. No muchas personas asistieron. Creció hasta el punto en que ahora tenemos 20 teatros y 70.000 asistentes. Se ha convertido en algo grande para manejar, dice Redford.
Para la joven productora Ángela Trejos Collazos, quien ha sido jefe de producción de largometrajes como Siembra y Epifanía de Óscar Ruiz Navia, el camino hecho por Redford es digno de un buen conocedor de la industria cinematográfica.
Sundance es una plaza anhelada para muchos directores que se salen de las narrativas tradicionales, que se arriesgan a experimentar con nuevas formas de contar historias y que buscan llevar al público otro tipo de cine alejado de los códigos de lectura tradicionales que nos ha dejado hollywood en la cabeza. Este año se postularon alrededor de 1000 películas internacionales para sólo 12 plazas dentro del festival, esto da cuenta de lo que significa Sundance para los nuevos directores y sus apuestas por ir en búsqueda de nuevas formas de hacer cine.
Redford se metió en la aventura de un Festival luego de una exitosa carrera como actor que despuntó en 1967 al ser convocado al elenco de la película Descalzos por el parque, junto a Jane Fonda. Aunque previamente, desde 1962, había empezado a actuar en teatro y había hecho apariciones con roles secundarios en cine.
Dos años más tarde haría dupla de oro con Paul Newman en Dos hombres y un destino. Ambos se convirtieron los sex symbol, rótulo que jamás le gustó.
Así su nombre empezaría a integrar las nóminas de películas como El gran Gatsby, Memorias de África con Meryl Streep, El río de la vida donde dirigió a Brad Pitt o Una propuesta indecente junto a Demi Moore.
De sus 72 títulos como actor, asegura Redford que el papel más divertido fue en Dos hombres y un destino. Me divertí mucho porque me encantan los caballos y viajar. Otra película de la que estoy orgulloso es El señor de los caballos porque es sobre cómo tratar a un caballo con compasión y comprensión.
Larry Hackett, de la revista People, lo definió como un león de Hollywood, una leyenda indiscutible.