¿Depende el goce sexual de las características anatómicas de la gente?

¿Qué tan cierta es la fogosidad de los calvos o la supuesta vida sexual liberada que llevan quienes caminan rápido? Estudios del mundo nos revelan una nueva anatomía sobre el disfrute sexual. Aquí las respuestas.

Estudios que afirman que los labios gruesos son sinónimo de placer o que la manera de caminar revela quién goza del sexo con más libertad, hacen parte de la lista de investigaciones que le atribuyen a distintas partes del cuerpo humano una injerencia importante en el disfrute de la sexualidad.Lo más curioso de todo es que la gran mayoría de estas revelaciones surgen de estudios hechos por universidades del mundo y que son conocidos a través de su publicación en revistas especializadas y serias como el Journal of Sexual Medicine, que se precia de revelar las últimas novedades en cuanto al tema. Pero a pesar del prestigio de las universidades y el medio que las revela, hay quienes sugieren que todas estas teorías no son más que mitos. En opinión de Ezequiel López Peralta, sicólogo y máster en sexología clínica, “no hay evidencia científica de que sean verdaderas. Ciertas características de imagen pueden ser atractivas, en el marco de una determinada cultura, por ejemplo, la estatura alta, el cuerpo tonificado, los labios carnosos, entre otras. También algunas personas sacan partido de sus virtudes físicas para dar placer, por ejemplo, un buen estado físico o un cuerpo con flexibilidad”, explica el experto. Por su parte, Fernando Calero de la Pava, sicólogo clínico-sexólogo reconoce que si bien el aspecto físico juega un papel clave en el tema sexual, en su opinión nada se puede comparar con el poder de “una mente abierta, sin represiones que estimule la sexualidad”. “Hay muchas teorías y cada una de ellas pareciera que aporta algo en el entramado complicado de la sexualidad humana”, expresa Lucio David González, siquiatra, sicoterapeuta, con máster en sicoanálisis, quien insiste que en la mayoría de personas hay una atracción por algo del otro y eso varía de un individuo a otro. Algunas de las teorías sobre diferentes puntos y características del cuerpo, según los estudiosos, pueden garantizar un mayor y mejor disfrute sexual. Así que tome nota y descubra los nuevos focos del placer.Labios carnosos: mejores orgasmos La teoría fue sustentada por la Universidad de Escocia y publicada en el Journal of Sexual Medicine. La institución se dio a la tarea de analizar el rostro de más de 250 mujeres y sus conductas sexuales. La conclusión a la cual se llegó es que aquellas con labios carnosos son las que más disfrutan de la intimidad y que incluso tenían más y mejores orgasmos que otras mujeres. Stuart Brody, profesor de psicología que participó en el estudio, dice que las mujeres con este atributo son más sensuales y como el tema aún no está tan claro, lo siguen investigando. “Las piernas y las caderas, especialmente, son más importantes que los labios. El brillo de los ojos, la piel tersa,  la cadencia y en particular el interés que muestra una mujer por su cuerpo, hacen de ella un icono sexual. ¿Usted cree que Angelina Jolie es más excitable que Madonna que tiene labios delgados?”, plantea Fernando Calero de la Pava, sicólogo clínico - sexólogo.Los calvos son más fogososUna endocrinóloga de Santo Domingo, María Rosa Beliar, apoyada “en estudios científicos” sugirió hace algunos meses que “el alto grado de testosterona en la sangre produce efectos negativos en el pelo y, en consecuencia, puede provocar la calvicie”, como lo afirmó el portal www.listindiario.com “Esto no es un mito, mientras más calvo es el hombre, más sexual. Esta hormona es la que le hace perder el pelo en la coronilla de la cabeza porque allí se aloja mucha testosterona”, afirmó la experta en endocrinología quien aportó a la publicación una explicación técnica según la cual “la hormona de la libido provoca la caída del pelo, puesto que las enzimas 5-alfa reductasas convierten la testosterona en deshidrotestosterona (DHT) y esta a su vez se encarga de atrofiar los folículos pilosos. Esto quiere decir que la DHT es la responsable de que el pelo se disperse y se vuelva más fino y débil, puesto que la estructura folicular se satura y recibe menos irrigación sanguínea, lo cual procede a tumbar al menos cien pelos por día”, dijo la especialista quien aclaró: “Hay calvos y no calvos con el mismo apetito sexual”.Por su forma de caminar los conocerásCaminar rápido más que ser una demostración de estar estresado, vivir con intensidad o exhibir que se cuenta con un buen estado físico hoy parece ser la manera de decirle al mundo: Soy un buen amante, disfruto el sexo al máximo, no me reprimo. Al menos así se desprende de una investigación realizada en la Universidad Católica de Lovaina según la cual quien camina más rápido disfruta más de la relación sexual. Un grupo de sexólogos observaron como el modo de caminar caracterizaba la fluidez, energía, sensualidad, libertad y ausencia de flacidez y bloqueo muscular que podía tener una mujer a la hora del sexo. Se encontró que existe un vínculo entre la inhibición muscular y perturbaciones en lo sexual. “Andar rápido puede tener muchos significados (ser acelerado, impulsivo, enérgico, etc.), de ahí a ser liberados me parece una observación muy aventurada. Para serlo y tener un sexo muy intenso, se implican variables como el estado de ánimo o los sentimientos hacia la pareja”, explica Chiquinquirá Blandón de la Clínica del Amor.Los pies: sinónimo de fertilidad“Los fetiches de los pies no son una desviación; los hombres están evolutivamente predispuestos a buscar pies pequeños (una señal de alta producción de estrógeno, lo que es una señal de fertilidad)”. Al menos eso señalan las neurocientistas Ogi Ogas y Sai Gaddam a través del libro ‘Un billón de pensamientos malos’. Ellas realizaron una investigación sobre el comportamiento sexual de más de cien millones de mujeres y hombres en internet y se dieron a la tarea de analizar los resultados de las búsquedas anónimas en la web. Y ellas buscan hombres de dedos y pies largos, como lo sugiere la bloguera Valeria Schapira: “Las extremidades largas son elegantes y auguran un gran trabajo íntimo. Puedo perdonarle a un hombre cualquier cosa: que le falte el pelo, que sea gordito y hasta panzón, pero jamás que tenga los dedos cortos y rollizos. Los pies son otro punto que considero relevante a la hora de elegir a un hombre aunque no está científicamente comprobado que un pie grande tenga su correlato en el órgano sexual masculino”. A mayor estatura... Según un estudio publicado por Public Library of Science, un grupo de científicos de la Universidad de Utah (EE.UU) comprobó que las mujeres se sienten más atraídas por los hombres altos. Al parecer todo está relacionado con el hecho de que ellas perciben que un hombre alto posee “una mayor capacidad para pelear por ellas, defender sus recursos y proteger a sus hijos”.Curiosamente, una buena estatura es “asociada con la salud, la dominación social, caras simétricas e inteligencia, tanto en ellos como en ellas. Estas relaciones han llevado a los científicos a pensar en parejas altas porque la altura implica «buenos genes» que pueden pasar a sus descendientes”, según publicó el portal www.abc.es Como si fuera poco, cada sexo mira en su opuesto ciertas particularidades, como lo explica Lucio David González. “Si es una mujer suele ser importante una voz dulce, una piel suave, unas formas armoniosas. Dicen unas teorías que esto es debido a como fuimos amados y cuidados. Si es hombre, que tenga hombros anchos y una voz gruesa para que la norma sea asimilada por los hijos”.