Talentos del Valle del Cauca que ya son paisas

Cinco deportistas de la comarca narran por qué decidieron partir para Antioquia.

Sigrid Romero presentó una carta en el año 2004 a la Liga Vallecaucana de Tiro con Arco. En ella renunciaba a competir por el Departamento en los Juegos Nacionales de ese año. Y la razón sorprende aun siete años después: “Las flechas, desgastadas por los entrenamientos, no están en su estado más óptimo”, escribió.La otra razón era que no tenía el fogueo suficiente. “Ir a esos juegos, con ese equipo y esas condiciones, era hacer el ridículo”, dice Sigrid, una de las mejores tiradoras con arco que tuvo el Valle y que ahora, quién lo creyera, vive en Medellín y defiende los colores verde y blanco de Antioquia.El caso de Sigrid se repite en otras disciplinas como ciclismo, lucha y lanzamiento de bala. El Valle está perdiendo silenciosamente a sus mejores deportistas y a nadie parece importarle.Le dieron pistaOtro de los talentos perdidos por el Departamento es el ciclista Cristian Tamayo, campeón nacional de pista y tercero en el mundial de Moscú, quien, sin embargo, en el Valle no encontró apoyo. “Algunas veces me debían hasta ocho meses”, dice.El conocimiento de que en Antioquia podía mejorar su vida lo llevó a tierras paisas. Tamayo tiene un acento notoriamente palmireño. Recuerda al Valle con nostalgia, sobre todo los domingos, que no entrena y le da por acordarse del pasado, de la familia, de la casa. Tiene 19 años y con Antioquia ha ganado varios nacionales, ha roto tres récords, tiene dos oros en la prueba de velocidad pura en los Suramericanos de Medellín 2010 y una medalla de plata en la prueba keirin en ese mismo evento. Ahora hace parte del equipo Orgullo Paisa. Y el Valle lo dejó ir...“Me tratan bien”Como también se fue la lanzadora de bala Ángela Rivas, de Candelaria. Ella es medalla de plata en los Suramericanos 2010, récord nacional oficial de mayores, campeona del Torneo Nacional Sub 23 en el 2010 y ha cosechado múltiples triunfos a nivel nacional. “En Antioquia me advirtieron que si salía del Valle, saliera bien. Pida su carta de libertad, dé las gracias y salga bien, me decían”, recuerda. Una lucha remuneradaY las historias de deportistas vallecaucanos ahora con la camiseta de Antioquia siguen. Víctor Asprilla llegó a Antioquia en el 2006, acompañado de su amigo Jarlis Mosquera, “sólo con la maleta al hombro y esperanzas”.En el Valle, dice, se sintió descuidado. A sus 17 años ya pertenecía a la Selección Colombia de Lucha. Sólo obtenía un auxilio de $100.000 mensuales y no sentía que iba a mejorar su nivel, pues no le daban fogueos. Su situación en términos económicos no ha cambiado mucho ahora que lucha por otro Departamento. Sin embargo, sus méritos (campeón Copa Esparta Puerto Rico 2003, campeón Panamericano en la Categoría Cadete Venezuela 2004, campeón Panamericano Juvenil Guatemala 2006 y multicampeón en Juegos Nacionales) son más valorados en territorio paisa. “Recibo más fogueos y atención en lo deportivo”, dice.Víctor sigue luchando para mejorar su realidad. Una medalla en el Campeonato Panamericano de Rionegro, el próximo 5 de mayo, lo clasificaría a los Panamericanos en Guadalajara 2010. Tal logro le traería un auxilio de $700.00 de Coldeportes y, por supuesto, mucha más atención en su preparación. Pero no todo se trata de medallas. En los Suramericanos del 2010 se ganó un carro gracias a la presea de plata que obtuvo. Vendió la camioneta y con la plata le compró una casa en Palmira a sus padres.Su amigo, el también vallecaucano Jarlis Mosquera, quien lo trajo de la mano a este deporte, es medalla segura. Desde el 2004 es campeón de lucha en los Juegos Nacionales. A nivel internacional ha sido medalla de plata en los Centroamericanos y del Caribe Puerto Rico 2010 y subcampeón en los Suramericanos 2010.La información que recibía Jarlis de sus compañeros de la Selección Colombia de Lucha acerca de la cultura deportiva en Antioquia siempre le despertó curiosidad. Hasta que recibió una propuesta, que aunque no era oficial, venía de parte de una persona muy cercana a este deporte (el esposo de la presidenta de la Federación Colombiana de Lucha, cuya sede está en Medellín).Sólo tenía que ir a Antioquia, entrenar un par de meses y ratificar, ya para esa región, su medalla en los Nacionales. Desde entonces la vida le ha sonreído: “De la Gobernación recibí diez millones de pesos por mi participación en los Juegos Olímpicos de Beijing, cinco millones por quedar campeones en los Juegos Nacionales Valle 2010 y los ahorros de la bonificación de Coldeportes. Con eso me compré un apartaestudio”.Jarlis espera firmar un contrato con la Liga Antioqueña de Lucha para ocupar el cargo de monitor. En este empleo va a desarrollar sus habilidades como entrenador y a promover el deporte en las categorías infantiles.No sólo los deportistas del Valle llegan a Antioquia por dinero. Noreley González, coordinadora social de Indeportes Antioquia, explica que “los deportistas reciben apoyo para que estudien y se les dan charlas periódicas de finanzas para que ahorren y también de sexualidad, convivencia y farmacodependencia”.El Valle, entonces, ha perdido varios de sus mejores deportistas, aunque William Gómez, de la Subgerencia de Altos Logros de Indeportes Antioquia, aclara que “no es política de Antioquia traer competidores de otras regiones, ellos deciden venir, motivados por las oportunidades que aquí se les brinda, pero no fuimos a buscarlos”.Cristian Tamayo, con algo de indignación, cierra esta historia con una frase que pone a pensar: “…aunque en Antioquia son más ordenados, la fuerza y el talento están en el Valle. Con decir que alguna vez unos alemanes hicieron un estudio y dijeron que el talento estaba era allá...”.En resumenEl Valle está perdiendo silenciosamente a sus mejores deportistas. Crisis económica y falta de fogueo expulsaron de esta tierra a la tiradora de arco Sigrid Romero, al ciclista Cristian Tamayo, a la lanzadora de bala Ángela Rivas y a los luchadores Víctor Asprilla y Jarlis Mosquera. Estos deportistas de alto rendimiento ahora visten la camiseta del eterno rival: Antioquia. Los cinco deportistas vallecaucanos ahora ganan medallas para tierras paisas. Ellos contaron sus historias.Cifras16 metros 86 centímetros fue el récord que impuso en el 2010 la lanzadora de bala Ángela Rivas.1 medalla de plata logró el luchador Víctor Asprilla para Colombia en los Juegos Suramericanos 2010.