Historia: Jeison López, el pesista olímpico y campeón mundial que por poco acaba con su vida

Por Andrés Felipe Cárdenas Berrio

Reportero de El País

De las ricas tierras de San Juan, Istmina, en el Departamento del Chocó, salió corriendo despavorido un inocente niño de 11 años de edad en busca de la paz. Las amenazas de muerte para él y su familia los obligó a buscar refugio en otra tierra, saliendo con una mano adelante y otra atrás; sin embargo, el destino le tendría preparado un mundo lleno de oros, triunfos y satisfacciones.

La familia López López llegó a Cali, sin un centavo, destrozados y con el corazón roto. Por fortuna, una tía de aquel niño los arropó en la capital del Valle y allí quien sería más adelante el orgullo de la familia.

Se trata de Jeison López, un pesista, que como miles de colombianos, han sido desplazados por la violencia; pero su tenacidad, la que le inculcaron su padres Lucreciano López y María Julia López, hizo que ‘Goku’, como lo apodan por su poderes como el Dragón Ball, hoy sea uno de los mejores deportistas de Colombia en la actualidad.

Para estar muy cerca de alcanzar su mayor sueño: ser campeón olímpico, ‘Goku’ ha sufrido, es desplazado y fue sancionado cuatro años, por un supuesto dopaje del que dice “ser inocente”, pero “no tuve el dinero para defenderme”, es muy costoso, le confesó a El País Jeison, quien estuvo a punto de suicidarse.

Del campo a las pesas

Desde los siete años supo lo que es trabajar. Todas las mañanas, a las 5:00 a.m. salía al campo, a cultivar en las tierras de propiedad de la familia.

Durante extensas nueve horas continuas y bajo un sol inclemente, todos los días y hasta los 11 años, Jeison sembró plátanos, tubérculos y a la vez también ‘camelló’ con la madera.

Sin embargo, de tener la familia un terreno bondadoso y fértil, lo abandonaron por culpa de los grupos al margen de la ley, sin absolutamente nada, no alcanzaron a llevarse sus pertenencias por las intimidaciones.

Por fortuna llegaron a Cali el señor Lucreciano, Jeison y un hermano. El resto de la familia tuvo que refugiarse en el Chocó mientras podían llegar a la ciudad de Cali.

Lucreciano consiguió trabajo y mandó por su esposa, la abuela María Ceferina y el resto de la gallada.

En la ‘capital Mundial de la Salsa’, en donde encontraron un camino fructífero en el que Jeison conoció a su primo Wilmer ‘Muñeco’ Torres, múltiple campeón nacional de pesas, quien se erigió como fuente de inspiración.

‘Goku’ a los 12 años inició en el mundo de las pesas. Entrenaba en las Canchas Panamericanas con el profesor Jhon ‘Gato’ Rodríguez, su primer mentor. A los 15 pasó a manos del histórico entrenador Jaiber Manjarrés.

Poco a poco fue creciendo y se fue forjando como el mejor pesista del país. Ganaba cuanto campeonato se le atravesaba. Luego dio el salto internacional y rápidamente se coló entre los mejores del mundo. Se consagró triple campeón Mundial Juvenil en el 2016 en Georgia, Estados Unidos.

Y cuando se perfilaba como uno de los pesistas fijos de Colombia para los Olímpicos de Tokio 2020, la desgracia volvió a atravesarse en su vida.

Una sanción de doping por poco lo lleva a la muerte

A los 19 años Jeison recibió una de las peores noticias de su vida. Una prueba de dopaje salió positiva. Eso acabó con sus ilusiones, entró en una etapa de depresión profunda.

Confiesa López que él es inocente, que jamás consumió la sustancia boldenona, un producto que aparece en las carnes en Colombia. Jeison López fue suspendido por cuatro años.

“No sé si cambiaron las muestras, si las contaminaron, pero claramente está que esas pruebas fueron manipuladas, las mías y de otros deportistas”, dijo.

Fueron cuatro largos años de continuas pesadillas. “Entré en un estado de depresión, de tristeza”, le reveló a El País el récord del mundo de los 89 kilos, quien confesó: “quería dejar de existir, sentía rabia, ira e impotencia. Varias veces quise acabar con mi vida”, relató el atleta del Valle.

Pero su familia jamás lo desamparó y evitó que cometiera una locura.

Luego de pasar ese trance luchó mañana, tarde y noche, entrenando más de seis horas diarias, para llegar más fortalecido a la tarima, y con la convicción de demostrarle a quienes lo acusaron de dopaje, que no tenía necesidad de consumir sustancias prohibidas para triunfar.

El regreso de un grande, ‘Goku’

Jeison López volvió por la puerta grande. Su máximo triunfo fue representar al Valle en los Juegos Nacionales 2023, ganó el oro. Esa victoria venía precedida de ser campeón de Juegos Panamericanos días antes, por eso estalló en alegría.

“Estaba feliz, demostré a muchas personas que estaban equivocadas, me juzgaron sin conocer la realidad”, dijo.

Hace dos semanas López aseguró su cupo a los Olímpicos París 2024, en la Copa Mundo de Pesas en Tailandia. Fue subcampeón y récord del mundo en el arranque, al levantar 182 kilos.

Ahora Jeison López tiene entre ceja y ceja París. Es uno de los tres mejores del mundo en los 89 kilos, por eso está proyectado a ser medallista olímpico.

“Me preparé para el regreso y le agradezco a Dios por darme la oportunidad de nuevamente levantar pesas, estoy orgulloso de representar al Valle, a mi familia y a Colombia, estoy feliz”.

Con ese regreso triunfal y con los Olímpicos a la vista, Jeison López partirá el lunes a España a seguir la última etapa de la preparación hacia las justas.

Allá estará un mes con la Selección Colombia de pesas y en junio se irán a Turquía, donde estarán hasta días antes de irse a París, sede de los Olímpicos entre el 26 de julio y el 11 de agosto.