En la víspera de Brasil 2014, COI golpea por atrasos para Olímpicos de 2016

Los JO de Río ya cuestan más que los de Londres-2012: 36.700 millones de reales (unos USD 16.680 millones), un monto que aumentará pues faltan por licitar varios proyectos.

El Comité Olímpico Internacional (COI) golpeó duro el martes a Brasil por los atrasos para los Juegos Olímpicos que Río debe acoger en solo dos años, a un mes y medio del Mundial de fútbol cuyas obras demoradas han llevado a la FIFA al borde de la desesperación. La organización de los JO-2016 "es lo peor que he vivido", afirmó el martes el vicepresidente del COI, el australiano John Coates, durante un foro olímpico en Sídney. "En el lugar la situación es crítica", afirmó. "Creo que la situación es peor que en Atenas (en 2004)", dijo Coates, quien lleva casi 40 años en el movimiento olímpico."Pero no hay Plan B. Iremos a Río", sostuvo no obstante. El jerarca recordó que el mes pasado, tras duras críticas de las federaciones deportivas internacionales a la organización del Río-2016, el COI creó una fuerza especial "sin precedentes" para tratar de acelerar los preparativos. Los organizadores de Río-2016 respondieron que están haciendo "progresos" concretos y que cumplirán con el calendario y el presupuesto estipulados. Las declaraciones de Coates son un eco de las insistentes críticas que la FIFA viene haciendo desde hace años a Brasil por las demoras en las obras para el Mundial de fútbol que comienza el 12 de junio. Previstos para el 31 de diciembre pasado, cuatro de los 12 estadios mundialistas -Sao Paulo, Porto Alegre, Cuiabá y Curitiba- aún están en obras. El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, llegó a decir que Brasil precisaba de "una patada en el culo" para acelerar los preparativos, una declaración que en su momento generó una crisis diplomática entre Brasilia y la FIFA. Ahora admite que los estadios estarán listos recién "a último minuto". "Vamos a lograrlo""Tenemos una misión histórica: organizar los primeros Juegos Olímpicos y Paralímpicos en Brasil y en Sudamérica. Vamos a lograrlo. En 2016, Río será el anfitrión de unos excelentes Juegos que cumplirán absolutamente con todos los cronogramas y presupuestos acordados", aseguró el comité organizador de Río-2016 en un breve comunicado. Los organizadores locales de los Juegos citaron dos "desarrollos cruciales y señales inequívocas de progreso": la apertura de la licitación para la construcción del parque olímpico de Deodoro, situado en un barrio humilde de Río, donde deben disputarse competencias de varias modalidades como hipismo, hockey sobre césped, tiro y pentatlón, y el reciente anuncio del presupuesto para infraestructura y legado. "El trabajo que está siendo realizado en asociación con los tres niveles de gobierno -federal, estatal y municipal- está mostrando progresos. El apoyo del Comité Olímpico Internacional es también crucial", aseguraron. La construcción de muchas instalaciones olímpicas todavía no ha comenzado y muchas están atrasadas. Las obras en Deodoro debían comenzar en 2013 pero recién empezarían en setiembre próximo. "Voy a hacer todo para no tener atrasos" pero "Deodoro en mi cronograma está en rojo, es lo que está con plazo más apretado", dijo hace cinco días el alcalde de Río, Eduardo Paes, en una entrevista con periodistas deportivos brasileños realizada por internet. También está atrasada la descontaminación de las pútridas aguas de la Bahía de Guanabara, una de las más bellas del mundo, donde deben celebrarse las competencias de vela. Miles de litros de aguas servidas son vertidos diariamente en la bahía. Paes, que no se ha pronunciado aún sobre las críticas de Coates, admitió que no sabe si la descontaminación de la bahía estará lista para 2016. Huelgas y atrasos han afectado las obras del parque olímpico de Barra, donde estaría ubicado el velódromo y el estadio de handbol. El estadio Engenhao, donde se deben realizar las pruebas de atletismo, está cerrado hace un año por problemas en el techo, cuya reforma tiene un atraso de varios meses. El 17 de abril, el alcalde de Río anunció el costo inicial de los Juegos luego de que el COI expresase su inquietud por la falta de un presupuesto detallado.