Dani Alves rompe relaciones con su abogado defensor, tras casi un año: ¿qué sucedió?

El reconocido exfutbolista, Dani Alves, ya lleva 10 meses en la cárcel esperando un juicio por violación que arrastra desde inicios de año. Todo pinta que el desarrollo del juicio final será a finales del mismo o a más tardar principios del 2024, pero en toda la preparación de la defensa, ocurrió un giro inesperado en la situación judicial de la figura pública, con pasado en el FC Barcelona y la Selección de Brasil.

Resulta que Alves, hombre que llevaba un buen tiempo en el Centro Penitenciario Brians 2 de Cataluña, atestiguó un duro cambio para afrontar las acusaciones por presunta agresión sexual. El abogado que venía cumpliendo el papel de defensor, Cristóbal Martell, fue sustituido.

En efecto, el brasileño decidió cambiar de abogado para este complicado caso, por lo que la doctora en Derecho Penal, Inés Guardiola, toma el papel sucesor de Martell en esa finalidad de defenderlo, todo por la causa abierta sobre la joven de 23 años en una discoteca de Barcelona, quien denunció tajantemente que fue agredida por Alves.

Cabe anotar que, en este proceso, se le impuso a Alves una fianza de 150 mil euros para indemnizar a la presunta víctima, pero esta renunció a esa sanción económica que podía darle la libertad al brasileño de 40 años, campeón de Copa América en 2007 y 2019 con la ‘Verdeamarela’.

Mientras tanto, en la cuenta regresiva para celebrarse el juicio sobre Alves, todo este proceso está anexo en la Audiencia de Barcelona, con la finalidad de que el tribunal desarrolle el sumario y la parte demandante entregue sus pruebas de la grave acusación; por lo tanto, Guardiola estará en el papel de respaldar a Alves y hacer lo posible por erradicar la medida de aseguramiento que afronta actualmente.

En fin, Alves está entre rejas por decisión de la magistrada en el caso, indicando que existían los indicios suficientes en materia racional para enviarlo a juicio e imponerle la fianza, declinada por la parte demandante.

Como si fuera poco, los profesionales forenses indicaron que “la víctima cumple con criterios de un trastorno de estrés postraumático de intensidad elevada, con repercusión funcional y deterioro en varias áreas de funcionamiento”, de acuerdo con el diario catalán Sport, dejando entrever que hay relación directa con lo que acusa.

Por su parte, frente a la agresión sexual de la que es acusado Alves, él y su defensa insisten en su inocencia, pues lo ocurrido en la discoteca habría sido por sexo consentido entre ambas partes.

La reacción de su hermano con el cambio de abogacía

Por supuesto, sus familiares y amigos defienden a muerte a Alves; en el caso de su hermano, Ney, escribió unas letras en sus redes sociales para respaldarlo.

“Nunca dejes de creer en Dios, incluso cuando todo a tu alrededor parezca desmoronarse (...) Persevera en la oración. Dios abre caminos para quien no desiste en medio de la prueba”, manifestó Alves, quien subió una imagen al lado de su hermano.

Lo más importante para el exjugador radica en que toda su familia lo está apoyando en semanas previas al juicio, sumándole su esposa, Joana Sanz, con quien estuvo intercambiando mensajes de amor con Alves desde el centro penitenciario.

De acuerdo con fuentes cercanas al exjugador en España, en palabras de la presentadora Leticia Requejo en TardeAR, el divorcio se paralizó y “los trámites se han detenido”, pues “ella dijo que, aunque tenga la intención de divorciarse, no va a dejar de lado a quien ha sido su esposo”.