Cero y van dos derrotas en línea de los ‘verdiblancos’

Deportivo Cali volvió a perder en la Liga Postobón I. Durante la segunda fecha del Apertura el equipo de Jaime De la Pava cayó derrotado 2-0 en el fortín del Once Caldas, el estadio ‘Palogrande’ de Manizales. El pasado fin de semana el primer traspié ‘azucarero’ fue en ‘Palmaseca’ contra el Cúcuta.

Deportivo Cali volvió a perder en la Liga Postobón I. Durante la segunda fecha del Apertura el equipo de Jaime De la Pava cayó derrotado 2-0 en el fortín del Once Caldas, el estadio ‘Palogrande’ de Manizales. El pasado fin de semana el primer traspié ‘azucarero’ fue en ‘Palmaseca’ contra el Cúcuta.La primera aproximación ofensiva fue del visitante. Minuto 2: remate desde antes de la media luna del área ‘blanca’ de Zamir Valoyes, la pelota picó en cinco con cincuenta, se hizo inmanejable para el arquero Henao y se estrelló el vertical derecho del arco; ningún verde capitalizó el rebote.En el 11: centro de Calle desde el costado derecho y en cinco con cincuenta, libre de marca, se erigió en el salto el juvenil Pajoy, conectó de cabeza arqueando la nuca, Centurión se quedó sembrado y la pelota pasó acariciando la base del vertical izquierdo. SalvadaSobre los 20, Hárrison Henao puso a correr a Micolta por el costado derecho del área ‘verdiblanca’, el delantero ‘blanco’ alistaba el gatillo para rematar en el mano a mano con Centurión y desde atrás, en su afán por desarmarlo, apareció el juvenil Héctor Quiñónez, tocó la esférica con la punta del guayo, descontroló al arquero y la pelota durmió en el fondo de las redes. 1-0. Autogol. A los 32, Fernández puso a correr a Jonathan Álvarez, el volante desbordó por derecha, plenamente habilitado, penetró en diagonal por el costado del área rival, tenía para fusilar a Henao pero hizo una de más y cuando remató, de palanca zurda, ya había perdido panorama y la zaga ‘blanca’ se había rearmado.Dos fracciones después se juntaron Valoyes y Jonathan en el área ‘blanca’, el primero se la sirvió en bandeja con pase medido y englobado, Álvarez tenía que rematar de cabeza, de primera, pero quiso devolverle el favor a su compañero y en su intento se pifió para regalar la pelota.A tres de finalizar el primer tiempo, minuto 42, pase profundo, partió habilitado Carbonero, hizo la diagonal rumbo al área caleña, mano a mano con el arquero Centurión, el paraguayo lo aguantó, el ‘blanco’ quiso enganchar, pero la reacción del cerrojo fue más que oportuna.A los 10 minutos del segundo tiempo, Dayro Moreno (había relevado al juvenil Pajoy) explotó en velocidad tras un pase profundo, Pablo Escobar se quedó con la mano arriba reclamando un fuera de lugar, el juez de línea habilitó, el delantero internacional encaró a Centurión en el borde del área, no hubo contacto pero el ‘blanco’ cayó de forma aparatosa, el árbitro se dejó impresionar y señaló el punto penal. Cobró desde los 12 pasos el mismo Dayro, minuto 12, botín diestro, ras de piso, fuerte, pero desviado, pues la pelota pasó acariciando la base del vertical derecho. Desperdicio.Cinco minutos después, en el 15, Once Caldas amplió la diferencia en el marcador: Carlos Carbonero se comió el último tramo de la cancha, corrió con balón dominado, buscó panorama, nadie lo obstaculizó, se inventó un remate fortísimo de palanca derecha, sobre la marcha, que dejó sin opciones al paraguayo Centurión, cuyo esfuerzo fue insuficiente. Golazo y 2-0.El Cali tuvo una opción para descontar en el minuto 29, cuando Pablo Escobar cobró un tiro libre directo con barrera nutrida, le pegó con mucha potencia, la redonda superó la muralla y le sacó astillas al travesaño.A cuatro del final, minuto 41, Jonathan Álvarez se juntó con Carlos Lizarazo, el juvenil ‘verdiblanco’ estalló el balón con un remate de zurda, sobre la marcha y cruzado, para estrellarla en el horizontal. Se salvó el Campeón.Los últimos diez minutos fueron para el visitante, que con la dinámica de Lizarazo le dio vida al fútbol en sociedad con Álvarez. Entre estos dos jugadores se encargaron de complicarle la vida a la zaga manizalita. Al final esa mejoría no alcanzó ni para el descuento.