A David lo baten los biberones y los pañales

Dulce María no para de jugar con la oreja de su papá. Él, que no se deja vencer de los delanteros rivales, queda indefenso ante su niña, de tan solo nueve meses.

Dulce María no para de jugar con la oreja de su papá. Él, que no se deja vencer de los delanteros rivales, queda indefenso ante su niña, de tan solo nueve meses.Ella, ahora es la mimada. Ya no es la pelota, la que tenía David Ospina de consentida cuando era niño. Es supequeña, la primera de su unión con Jessica Sterling, y que nació en Francia. "Nos gustó el nombre de Dulce María, por la ternura que refleja", dice David, quien pasa un par de días de vacaciones junto a sus padres antes de volver a Francia.Hoy, más allá que ampliar la familia y buscarle hermano a Dulce, David pretende comenzar un año de grandes logros, tanto con la camiseta de la Selección como con la de su club, el Niza, o el que venga después.Previo a su viaje, compartió algo de su tiempo con EL COLOMBIANO. ¿Cómo va esta temporada con el Niza? Estos primeros seis meses han sido muy buenos, se han logrado buenas cosas. Resta la mitad del campeonato. Espero seguir aprovechando de buena forma todos estos seis meses. ¿Cómo tomó la extensión de contrato con el club? Bien, te das cuenta que estás haciendo bien las cosas. De todas formas las puertas siguen abiertas para cualquier cosa con otro club. Si viene algo para mejorar, será bienvenido. Cuando se hace una extensión de éstas es para asegurarlo, porque fijo lo buscan más equipos... Hay algunos clubes interesados en mí, pero mi presente es el Niza, quedan seis meses de campeonato. Tengo que hacer las cosas bien si quiero pensar en que al final del torneo puedo tener un cambio, venir un equipo mejor, más grande. ¿Cómo es el fútbol francés? Rápido, de mucha potencia; vertical y aguerrido. Hay mucha diferencia con el colombiano, mucha influencia de los africanos. ¿Cómo es pelear en la parte baja de la tabla, algo diferente a lo que vivió en Nacional? Es difícil, todos los partidos son unas finales, no se puede regalar nada, siempre es peleando y peleando. El próximo 9 de febrero tendrá un gran reto ante España en Madrid, ¿qué significa para usted? Va a ser un partido bueno para jugar, nos brinda buena preparación. Espero, si puedo jugar, aprovecharlo. Toca demostrar en cada partido el nivel en que estamos. ¿Cómo vive este nuevo proceso con la Selección? Animado, comenzamos bien, siento que vamos por buen camino. El objetivo es uno solo: llegar al Mundial. Es el objetivo que todos tenemos, que debe ser común. ¿Cómo ha sido el diálogo con los otros porteros, tanto con los veteranos como Córdoba y Mondragón, como con los de este ciclo, como Bréiner Castillo y Luis Martínez? Con todos tengo una buena amistad, trato de aprenderle a los de más experiencia. Yo estoy apenas empezando en la Selección, hay que tomar la experiencia.Nacional sigue en su corazón, ¿está pendiente del equipo? Claro, lo sigo siempre por Internet, trato de estar pendiente. Lastimosamente no se tuvo un buen resultado, creí que íbamos a lograr cosas mejores, más positivo. Ahora se empieza un nuevo proceso, ojalá todo mejore. Usted es de la casa verde, ¿cómo ve que se tuvieron cuatro porteros, ninguno del club y dos foráneos? En Antioquia hay buenos arqueros, pero si un portero de afuera viene y aporta, pues se queda con el puesto. Es lo que busca el equipo. Esto es de oportunidades, si alguien viene y aprovecha, pues hay que apoyarlo. Usted es el último gran ídolo del arco, ¿qué siente con eso? Contento, te marca mucho, lo sientes en la gente en la calle. Tengo que agradecerle a la hinchada, lo que he vivido en Nacional es lo más grande para mí. EL NUEVO PAPÁ ¿Cómo ha sido la experiencia de papá de Dulce María? Muy feliz, es algo que no te imaginas que te puede hacer tan feliz una persona. No hay palabras para decirlo. En Europa, con el ritmo del fútbol allá, ¿es más fácil tener una familia que en Colombia? En Europa se vive con más tranquilidad, y tienes mucho más tiempo. Las concentraciones son de solo una noche y puedes dedicarle más tiempo a la familia. Cuando llego de los entrenamientos me dedico a ella, a jugar, trato de aprovechar cualquier minuto a su lado. Como padre, ¿cómo se ve? Alcahueta, estricto, regañón... No sé, ahora está apenas empezando. Ahora es más fácil por la edad. Pero siempre se le debe brindar espacio a los hijos, darles confianza, pero enseñando que hay valores que merecen respeto.¿Cómo va la relación con su hermana Daniela y su nuevo esposo, James Rodríguez? Muy bien, James es una excelente persona y hacen una buena pareja junto a Daniela. Esperemos que tengan muchos años de felicidad. Hay visitas entre Portugal y Francia, charlas de fútbol entre ustedes...? Hay fines de semana en que ellos pueden ir a Niza o nosotros podemos viajar a Portugal, no se ha dado mucho, pero es algo posible. ¿Cómo es vivir en un paraíso como es Niza? Me gusta salir con mi esposa, ir a los restaurantes, conocer las ciudades que están cerca que son paraísos como Mónaco y Cannes. Niza es muy bonita; es una ciudad en la costa del Mediterráneo, y la costa sur es hermosa. ¿Y el trato con los compañeros? Con todos trato de llevar una buena relación. Ahora hay un argentino nuevo, Renato Civelli, y con él me entiendo más.¿Algún día volvería a jugar en Colombia y en Nacional? Volver a Nacional es un anhelo. Siempre está en mi mente, poder volver al equipo que te dio la oportunidad de debutar, de ser campeón. Espero que cuando vuelvan me puedan recibir. Fue campeón en Colombia, está en Selección, juega en Europa. Pero todavía es muy joven, ¿cuál es su gran sueño ahora? Quiero dar un salto a un equipo más grande en Europa, que tenga más aspiraciones, que juegue la Liga de Campeones, que siempre pelee por ser campeón. Para eso debo aprovechar estos seis meses.¿Qué pide para 2011? No es de pedir, es de hacer. Voy a trabajar fuerte, muy duro, entrenarme con seriedad, jugar con responsabilidad. Eso me puede dar la posibilidad de ir a otro equipo con más responsabilidad. ¿Qué quiere olvidar del año que pasó? Este año fue muy bueno para mí, tanto en lo futbolístico como en lo personal. Puedo jugar, sigo en Selección y tengo una familia hermosa. Decir que me quiero olvidar de algo sería ser ingrato, la vida me ha dado mucho.