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¿Cómo saber si una joya es de oro blanco?
El oro y la plata puros son algunos de los metales que generalmente no causan alergias. | Foto: Getty Images

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¿Cuál es el tipo de joyas que no dan alergia?

Las alergias se manifiestan como comezón y enrojecimiento.

17 de noviembre de 2023 Por: Redacción El País

Pendientes, gargantillas, collares, pulseras y anillos son algunos de los accesorios más comunes para dar un sello propio a un ‘look’. Sin embargo, más allá de las formas, tamaños y texturas de la joyería, es importante tener en cuenta el material y su calidad.

Es común que después de utilizar aretes por mucho tiempo, por ejemplo, aparezcan señales de irritación, enrojecimiento y picazón en los lóbulos de las orejas. Si es su caso, es posible que sea alérgico al material del accesorio, por lo que debe conocer qué tipo de joyería no genera este tipo de reacciones.

La mayoría de las veces, la alergia a la joyería está relacionada con el tipo de metal que se utilizó al fabricarlos. Materiales como el plomo, el cobalto o el níquel están relacionados con este tipo de reacciones alérgicas. De hecho, se dice que la alergia al Níquel afecta hasta al 20 % de la población.

El níquel es uno de los elementos que puede provocar alergias. (Imagen de referencia). | Foto: Álvaro Cardona

La alergia al níquel es una causa común de dermatitis alérgica por contacto, sarpullido con comezón que aparece cuando la piel toca una sustancia generalmente inofensiva. El portal de salud Mayo Clinic explica que la alergia al níquel suele manifestarse después de una exposición reiterada o prolongada a elementos que contienen este metal.

Además, generalmente la bisutería está fabricada o lleva revestimientos elaborados con una gran variedad de materiales que pueden irritar una piel sensible, como son el cobre y el zinc. No obstante, también existen materiales hipoalergénicos, con los que evitará molestias en la piel a la hora de utilizar accesorios.

Uno de los más populares es el acero quirúrgico 316L, ampliamente utilizado en la fabricación de pendientes. Además de ser hipoalergénico no contiene níquel y es resistente a la oxidación, por lo que no se empañará ni corroerá con el paso del tiempo.

Otro de los metales recomendados por los expertos para evitar alergias es el titanio. Se trata de un material hipoalergénico, ligero y resistente a la corrosión, pero también un metal muy fuerte y duradero, por lo que se recomienda para elegir joyería de uso diario.

El oro de 14 kilates o superior es otro de los materiales hipoalergénicos por naturaleza. Cabe decir que para que la aleación sea duradera y no se oxide debe ser de al menos 14 kilates. Esta es una muy buena alternativa para pieles sensibles, pues el oro no genera irritaciones ni alergias.

La plata de ley, otro de los materiales conocidos en la elaboración de joyería, también es hipoalergénica. Aunque la mayoría no muestran reacciones adversas por su uso, algunas personas también pueden ser alérgicas a la plata, por lo que es necesario tener precaución.

Aunque puede ser tentador escoger accesorios de bajo costo, la calidad del material puede afectar la salud de las orejas. Por esa razón, es clave elegir materiales que son seguros para la mayoría de las personas y, por tanto, no causarán reacciones alérgicas. La bisutería y las aleaciones de metales son más propensas a causar irritaciones y alergias, por lo que debes evitarlos en la medida de lo posible.

Es clave tener precaución con los materiales que generan alergias. | Foto: Revista Fucsia.com

¿Cómo identificar la alergia?

Una reacción alérgica (dermatitis por contacto) generalmente comienza en cuestión de horas o días después de la exposición al níquel. Si la piel es muy sensible, esta reacción puede durar de dos a cuatro semanas. Es importante tener en cuenta que lo más común es que solo se observe en la piel que tuvo contacto directo con la joya, pero en algunos casos aparece en distintas zonas del cuerpo.

Estos son algunos signos y síntomas de la alergia al níquel:

  • Erupción cutánea o bultos en la piel.
  • Picazón, que puede ser intensa.
  • Enrojecimiento o cambios en el color de la piel.
  • Manchas de piel seca que pueden parecerse a una quemadura.
  • Ampollas y drenaje de líquido en casos graves.

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