Híbridos de pastura impactan de manera positiva la vida de productores ganaderos

La tecnología ha permeado diferentes campos de la cotidianidad, siendo uno de estos, el relacionado a la naturaleza. Diferentes empresas se las han ingeniado para encontrar maneras de impactar la vida de quienes dependen del campo, facilitando y mejorando ciertos procesos sin reemplazar las partes fundamentales de la cadena productiva.

Un ejemplo de ello son los híbridos mejorados de pastura, tecnología desarrollada por el Programa de Forrajes Tropicales de la Alianza bioversity International y el CIAT, y distribuida por la empresa mexicana Papalotla desde hace ya 25 años.

Este producto, que ya ha beneficiado a ganaderos en 70 países de América Latina, África y Asia, tiene como propósito minimizar las afectaciones de problemáticas como la sequía, la degradación del suelo y las plagas, sin sacrificar el valor nutricional del alimento para el ganado.

“A los animales les gusta mucho, es más palable y suave, no es como esos pastos duros que hasta les pueden desgastar los dientes a las vacas. Además, se adapta bien a las zonas húmedas de aquí del Caquetá”, aseguró Francy Martínez, ganadera del municipio El Paujil.

Este tipo de pasto brindaría además beneficios para el animal que lo consume, que terminarían generando impacto en otros aspectos de la cadena productiva, incluso después de salir de la finca en donde se cultive.

“La mayoría de las heladerías tienen que agregar crema de leche para que el helado quede cremoso. En nuestro caso no hace falta, porque nuestra leche es bien densa y espesa, y eso hace que el helado nos quede naturalmente cremoso”, explica.

Ahora, el reto está en continuar generando soluciones de esta índole, enfocadas cada vez en el cambio climático y el bienestar de los productores.

“Estamos desarrollando híbridos más completos: resilientes ante condiciones ambientales extremas, productivos, y que además puedan aportar a la sostenibilidad de los sistemas ganaderos”, explica la Dr. Rosa Jauregui, Fitomejoradora del Programa de Forrajes de la Alianza.

Y es que según explicó el Dr. Stefan Burkart, científico del Programa de Forrajes de la Alianza y Economista Agrícola: “No basta con entregar semillas de híbridos mejorados y esperar que funcionen como un pasto cualquiera. Estos materiales son el resultado de muchos años de investigación y tienen un gran potencial, pero para que realmente den resultados en el campo es importante considerar un manejo adecuado y asistencia técnica que ayudaría a que los productores aprovechen al máximo sus beneficios económicos y productivos”.