Debemos volvernos orgullosos del Pacífico, dice la nueva Ministra de Cultura

La caleña Mariana Garcés Córdoba, quien fue designada como nueva ministra de Cultura, dijo que ejercerá para todos los colombianos. La nueva funcionaria habló con El País de sus políticas, proyectos e ideales.

¿Cuál será su línea de trabajo en el Ministerio de Cultura?Esas líneas ya están trazadas: hay planes nacionales de teatro y de danza. Se debe acometer la ley de música, mirar el tema de patrimonio de bienes inmuebles y consolidar un sistema nacional de cultura, con casas de la cultura y secretarías departamentales y municipales, para que los esfuerzos sean más eficaces. También hay que trabajar en procesos y en los eventos como resultado de esos procesos.En el ministerio se trabaja por las culturas jóvenes, urbanas y populares, pero poco por las tradicionales y campesinas.Todas las manifestaciones deben ocupar el lugar que merecen. Venimos de una ministra afrodescendiente y la cultura negra logró visibilidad. También se ha hecho trabajo importante con los indígenas y las comunidades urbanas. Con las campesinas menos, y se les debe poner atención. ¿Habrá investigación cultural?Para el presidente Santos es de vital interés el Instituto Caro y Cuervo. Quiere fortalecerlo. También el Instituto Colombiano de Antropología e Historia, al cual compete la investigación cultural. Y todo proceso cultural debe ser investigado, pues las políticas no se sacan de la manga ni son las que al ministro le gustan.El Concurso de Polímeros en los años 70 y los Talleres Crea en los 90 dieron gran realce a las culturas autóctonas. Hacen falta certámenes similares.Nuestra función es facilitar la gestión cultural, pero a los artistas les falta voceros y unirse en propósitos comunes. Mientras ello sucede, es posible que el ministerio atienda ese tipo de actividades.Ellos se desaniman con lo farragoso del papeleo para presentar proyectos.Se ha hecho un esfuerzo por simplificar las convocatorias. Lo ideal es poder hacer los trámites por internet, aunque en las pequeñas poblaciones no hay esa tecnología. Como presumiblemente habrá reforma tributaria, ¿el ministerio gestionará mejores estímulos tributarios para que el sector privado fomente la cultura?Los estímulos están en la Ley de Cine y se piensa hacerla más atractiva. También la Ley de Patrimonio concede estímulos, que son poco conocidos. Si se pensara en algo parecido a la Ley de Mecenazgo de Brasil, se necesitaría gran concertación con el Ministerio de Hacienda y con Planeación. No es un tema descartable, pero tampoco está en la agenda inmediata del Gobierno.¿Y qué tal concertar con el Ministerio de Comunicaciones para hacer que los medios divulguen las culturas propias?En eso se avanzó. Hubo alianzas estratégicas con los canales privados, para mostrar temas culturales. Creo que la jornada complementaria debemos tratarla a fondo con el Ministerio de Educación, y con la Cancillería la cultura en el exterior.Pero la deculturación sigue...La única manera de forjar identidad es reconocer lo local. Hay muchos procesos no percibidos, sobre todo en comunidades más alejadas, que es donde verdaderamente hay quehacer cultural. Es tarea del ministerio hacerlos visibles.Usted afirmó que está comprometida con el Valle. ¿A qué dará prioridad?Debemos volvernos orgullosos del Pacífico, que marca nuestras maneras de hacer, de comer, de bailar. El tema de infraestructura es importante, como el centro cultural de la Comuna 13, la Manzana del Saber y la renovación de La Tertulia.El Ministerio de Cultura es para soñar, pero el presupuesto quita el sueño.Hay que concertar los recursos nacionales y los locales para aprovecharlos mejor. Y llegar a acuerdos con Hacienda y Planeación para obtener más presupuesto.¿Ésta es la culminación de su trayectoria cultural?No me siento tan vieja como para pensar en eso. Es un reto muy grande, pero cuando me retire, probablemente volveré otra vez a Proartes y el Festival Internacional de Arte. No creo que después de ser ministra deba retirarme.