Asofondos advierte que solo uno de cada cuatro colombianos logra pensionarse

Un nuevo análisis de Asofondos encendió las alarmas sobre el panorama pensional en Colombia. El gremio, que agrupa a los fondos privados, advirtió que las fallas estructurales del mercado laboral siguen siendo el mayor freno para que los trabajadores accedan a una mesada de jubilación, pese a cumplir con la edad exigida.

Según el informe, tres de cada cuatro trabajadores pasan más de un tercio de su vida laboral sin cotizar al sistema, lo que reduce drásticamente sus posibilidades de cumplir los requisitos. Solo uno de cada cuatro colombianos logra pensionarse, una cifra que evidencia la baja cobertura y las dificultades para garantizar ingresos en la vejez.

Asofondos afirma que el problema no radica en el diseño del sistema pensional, sino en la estructura del mercado laboral. La informalidad, que afecta a millones de personas en algún momento de su vida productiva, se mantiene como un obstáculo persistente. “Cada año que no coticen atenta contra un retiro y vida dignos en su etapa de retiro”, señaló Andrés Velasco, presidente del gremio.

El estudio también encontró que una de cada cuatro personas ha cotizado menos del 4 % del tiempo desde su inicio laboral, y que la mitad de los trabajadores acumula menos del 25 % del tiempo necesario para pensionarse.

Estos vacíos, conocidos como lagunas laborales, pueden reducir el monto de la pensión entre un 50 % y un 70 %. De acuerdo con Velasco, cerrar estos huecos permitiría aspirar a mesadas significativamente más altas.

El análisis revela diferencias marcadas entre géneros. La mitad de las mujeres ha cotizado menos del 23 % del tiempo requerido. Un ejemplo ilustrado por Asofondos indica que una mujer de 30 años, que inició su vida laboral a los 22, debería haber acumulado ocho años de aportes continuos, sin embargo, en promedio solo registra 1,8 años.

En el caso de los hombres, la situación no es muy distinta: la mitad ha cotizado menos del 27 % del tiempo necesario. Un trabajador de 30 años, que también empezó a los 22, debería tener ocho años cotizados, pero apenas suma 2,2 años. Estas cifras muestran que la intermitencia laboral afecta por igual, aunque con especial impacto en las mujeres.

Velasco añadió que, aunque en la última década se ha visto una reducción en los niveles de informalidad, estos siguen siendo elevados y afectan a la mayoría de los colombianos en algún punto de su trayectoria laboral.

La conclusión del informe subraya que la sostenibilidad pensional del país dependerá de mejorar la estabilidad laboral y reducir los periodos sin aportes, factores decisivos para garantizar una vejez con ingresos suficientes.