"Carretillas son usadas en el Estadio para montaje de tarimas": Secretario de Deportes

Diego Cardona explicó lo sucedido frente a la denuncia que hizo la Asociación Sentir Animal de que en el Estadio estarían utilizando vehículos de tracción animal para trabajo.

Sorprendida se declaró la Secretaría de Deportes ante la polémica denuncia que hizo en la mañana de este viernes la Asociación Sentir Animal, asegurando que un vehículo de tracción animal iba a ser utilizado para sacar escombros del Estadio Pascual Guerrero.Diego Cardona, titular del despacho, aseguró que la remoción de escombros en el estadio culminó hace casi un mes, antes de iniciar el Mundial de Fútbol Sub 20 del que Cali fue sede. "Esos escombros fueron sacados en volqueta", aseveró.Según el Secretario de Deportes, la presencia de la carretilla en las inmediaciones del estadio se debía a los trabajos de montaje que se estaban ejecutando para un evento que se iba a realizar en el escenario deportivo, una vigilia cristiana programada para este viernes, que al final no logró obtener el permiso para llevarse a cabo en el Pascual Guerrero. El funcionario explicó que, al parecer, es común que los organizadores de los eventos usen las carretillas para los trabajos internos de montaje de tarimas dentro del Pascual, ya que facilitan la movilización de elementos de gran peso. No obstante, aclaró que nunca se permite que las carretillas sean tiradas por caballos dentro del escenario, pues ese trabajo de arrastre debe ser realizado por personas. Cardona concluyó que "en ningún momento la carretilla ingresó al Estadio".La denuncia que prendió las alarmasLa Asociación Sentir Animal había denunciado en la mañana de este viernes que un caballo anciano había sido utilizado para transportar escombros provenientes de las obras del Estadio Pascual Guerrero. Este organismo de protección manifestó que el miércoles 7 de septiembre fue testigo del momento en que el animal era conducido al estadio para, presuntamente, recoger una carga en el escenario, según la versión del carretillero y aparente dueño, Eloy Gutiérrez. "El anciano animal se encuentra en grave estado de desnutrición, supuraba una secreción purulenta por sus fosas nasales y ojos. Fue amarrado en forma de tren a tres carretillas que serían cargadas con elementos salientes del elegante estadio", expresó la Asociación. Sentir Animal había señalado a través de un comunicado que "al parecer la Alcaldía por ahorrarse unos pesos, decidió contratar el servicio de tracción a sangre, con un solo caballo bastante enfermo para que arrastrara no una sino tres carretillas". Integrantes de la Asociación aseveraron que "ni el carretillero ni el aparente dueño demostraron la tenencia legal del animal, ni de las carretas, las cuales fueron inmovilizadas por la Secretaría de Tránsito y conducidas a los patios en una grúa". Los voluntarios de la ONG aseguraron que fueron objeto de insultos por hombres que trabajaban en ese momento en el Estadio. Esta situación fue confirmada por el subintendente Alex Dorado, coordinador del programa de Maltrato Animal de la Policía, quien añadió que eran entre 15 y 20 personas que, incluso, estaban armadas con cadenas en las manos. La Policía Ambiental, el Centro de Zoonosis y la Asociación Sentir Animal intervinieron en el hecho y llevaron al animal a un lugar seguro para brindarle los cuidados adecuados.Por último, la Asociación pidió que la Secretaría de Gobierno Municipal sancione a los responsables del caso de maltraro animal.Lida Yaneth Ramírez, presidenta de la Asociación, instó al Alcalde a tener en cuenta a los animales dentro de sus políticas de inclusión, que desde distintos escenarios y eventos culturales ha promocionado.Carretillas tendrán que desaparecer en eneroEl reciente episodio caldeó de nuevo los ánimos sobre la permanencia de los vehículos de tracción animal en Cali.Sobre el tema de la circulación de las carretillas en la ciudad, Alexander López, secretario de Tránsito Municipal, recordó que sólo hasta el 31 de enero de 2012 éstas podrán utilizar la tracción animal, ya que desde entonces deberán remplazar el caballo por un vehículo. "El inconveniente es que desde el 2002 debieron haber dejado de transitar las carretillas en las ciudades de más de cien mil habitantes, según la normativa nacional. Pero desde Bogotá y sectores que se benefician con el tema, el proceso se ha dilatado", aseveró López.