Aunque el alcalde de Buenaventura, Eliécer Arboleda, decretara toque de queda y prohibición de manifestaciones ciudadanas, tras los desmanes en la noche del viernes, decenas de ciudadanos salieron este sábado a las calles para reiterar su apoyo al paro cívico y rechazar con camisetas blancas los actos de vandalismo.