Entre impresionantes cañones, se encuentra ubicado Barichara, un pequeño municipio santandereano que, pese a figurar en guías de viaje como un destino imperdible, y uno de los más famosos, aún conserva la sensación de ser un pueblo detenido en el tiempo.

Y es que, su arquitectura en piedra, sus casonas blancas y su ritmo pausado lo han convertido en uno de los destinos más encantadores de Colombia.

Iglesia de Barichara, Santander | Foto: Captura de pantalla YouTube / Dónde está Vlacho?

No en vano, hoy es considerado por muchos como “el pueblo más bonito de Colombia”, título no oficial, pero repetido entre viajeros. Su centro histórico está compuesto por calles empedradas y casas de muros de tapia pisada, construidas desde el siglo XVIII y conservadas con rigor.

No obstante, en este lugar, son muchas los lugares por explorar. Allí, se encuentra la Catedral de la Inmaculada Concepción, imponente con su piedra amarilla, que domina la plaza principal y es uno de los puntos más fotografiados de Barichara.

El mirador El Salto del Mico, Barichara | Foto: Cortesía - TripAdvisor

Cabe decir que, el municipio fue declarado Monumento Nacional en 1978, y desde entonces diferentes comunidades, fundaciones y autoridades locales han trabajado para mantener su belleza.

Aquí, las fachadas deben conservar su estética original y los techos siguen siendo de teja de barro, lo que contribuye a esa sensación de pueblo de antaño.

Ahora bien, más allá de su arquitectura, Barichara está rodeado por un paisaje que combina montañas, cañones y una vegetación seca característica del territorio santandereano. Desde el mirador del Salto del Mico se contempla una vista impactante del Cañón del río Suárez, uno de los puntos que más sorprende a los visitantes.

Por si fuera poco, este lugar es también un refugio de artesanos, pues en diferentes talleres se pueden ver oficios tradicionales como la talla en piedra, la cestería y el trabajo en fique.

Y ni qué hablar de la gastronomía, pues este pueblo ofrece una mezcla entre cocina santandereana tradicional, como las carnes al fogón y el mute, y propuestas contemporáneas impulsadas por chefs que se han instalado en la zona.

Cabe decir que, quienes quieran llegar hasta estas tierras, la ruta más común es salir desde Bucaramanga hasta San Gil, y de allí en transporte terrestre directamente al municipio.

La economía de Barichara está basada en un 80 por ciento del turismo.

Si sale desde Cali, en promedio, un viaje en vehículo podría costar unos 454.700 pesos, teniendo en cuenta peajes y gasolina para el vehículo. Eso, sin dejar de lado, el valor del hospedaje y la alimentación.

Ahora, en cuanto al clima del lugar, suele ser cálido durante el día, con noches más frescas, por lo que se recomienda ropa ligera para disfrutar de los bellos paisajes de este mágico pueblo colombiano.