A medida que las personas envejecen, las necesidades nutricionales pueden cambiar. Mantener una buena salud y bienestar se vuelve crucial, por lo que es importante asegurarse de obtener los nutrientes adecuados a través de la alimentación.
Vitamina D: apoyo para la salud ósea
La vitamina D desempeña un papel crucial en la absorción de calcio y el mantenimiento de huesos y dientes saludables. Al envejecer, la capacidad para producirla a través de la exposición solar disminuye.
Por lo anterior, los expertos sugieren que los adultos mayores de 50 años consideren tomar suplementos de vitamina D para garantizar niveles adecuados en el organismo. La dosis recomendada varía según la edad y la situación individual, por lo que es importante consultar un profesional de la salud para determinar la cantidad adecuada.
Vitamina B12
La vitamina B12 desempeña un papel esencial en la función nerviosa y su deficiencia se ha asociado con diversos problemas de salud como depresión, demencia, disminución cognitiva y anemia, según AARP, una organización sin fines de lucro dedicada a trabajar con personas de 50 años o más.
Además, esta vitamina juega un papel importante en la producción de mielina, una sustancia que recubre los nervios y facilita la transmisión de señales eléctricas entre ellos.
El Instituto Nacional del Corazón de Estados Unidos establece que la ingesta recomendada de vitamina B12 para adultos es de 2.4 mg. Esta se puede encontrar en suplementos multivitamínicos y multiminerales, entre otras fuentes.
Calcio: mantenimiento de la densidad ósea
El calcio es otro nutriente importante para la salud ósea, el cual también, al pasar de los años, se recomienda fortalecer a través de suplementos que le permitan al cuerpo una mejor absorción.
Los suplementos de calcio pueden ser recomendados para los adultos mayores, especialmente aquellos que tienen una ingesta dietética insuficiente de este mineral. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el exceso de calcio también puede tener efectos negativos, como la formación de cálculos renales. Por lo tanto, es esencial consultar a un especialista antes de comenzar cualquier suplementación.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH) y la Oficina de Suplementos Dietéticas la ingesta diaria de calcio recomendada es la siguiente:
- 1200 miligramos (mg) por día para las mujeres de 51 años o más
- 1000 mg por día para los hombres de entre 51 y 70 años
- 1200 mg por día para los hombres de 71 años o más.
Omega-3: beneficios para el corazón y el cerebro
Los ácidos grasos omega-3, como el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA), son conocidos por sus propiedades antiinflamatorias y beneficios para la salud cardiovascular y cerebral.
Para cuidar la salud del corazón y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, además de mantener una función cerebral óptima, los profesionales sugieren el consumo de suplementos de omega-3, como el aceite de pescado.
Magnesio
Después de los 50 años el magnesio se convierte en uno de los nutrientes esenciales que no debe faltar en la dieta.
Este mineral desempeña un papel fundamental en la producción de energía, el desarrollo óseo y la contracción muscular. Además, ayuda a mantener niveles estables de azúcar en la sangre y presión arterial, como destaca el sitio web Mejor con Salud.
Siguiendo estas recomendaciones, la Oficina de Suplementos Dietéticos establece una ingesta diaria recomendada de 420 mg para hombres y 320 mg para mujeres de 50 años en adelante.
Multivitamínicos: apoyo nutricional general
Los multivitamínicos pueden ser útiles para cubrir las necesidades nutricionales generales en las personas mayores de 50 años. Estos suplementos contienen una combinación de vitaminas y minerales esenciales que pueden ayudar a compensar posibles deficiencias nutricionales y mantener la salud en general. Sin embargo, es importante recordar que los suplementos no deben reemplazar una alimentación saludable.
Los multivitamínicos son una opción conveniente para garantizar que se obtengan los nutrientes necesarios, pero es esencial recordar que cada persona es única y que las necesidades pueden variar.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.