Que médicos internos, residentes y estudiantes del HUV hayan entrado en asamblea permanente no arregla los graves problemas por los que atraviesa el centro de salud.Sin desconocer el derecho a la protesta, resulta contradictorio un paro para presionar al Gobierno por las soluciones que requiere esta grave crisis. Y se olvida que la salud es un servicio público esencial. Con abandonar su labor y bloquear el hospital sólo se perjudica a los enfermos que no se reponen de sus dolencias si se les niega este servicio fundamental. Lo mejor es que quienes protagonizan esta huelga busquen encausar bien su protesta sin paralizar al HUV, pues ya es suficiente con las deficiencias que padece. Residentes y estudiantes de la Universidad del Valle están llamados a dar ejemplo, especialmente desde que se conoció la propuesta del gobernador de que sea la institución quien dirija el centro hospitalario más importante del suroccidente colombiano.